El Ejército de Israel dijo el miércoles que había detenido a varios soldados y a un civil bajo sospecha de haber filtrado cifras de víctimas en las redes sociales, antes de que las familias de los muertos fueran informadas oficialmente.

Tras una semana de combates terrestres con Hamas en los que han muerto al menos 32 soldados, algunos israelíes se quejaron de haberse enterado de la muerte de sus familiares a través de la red de mensajería WhatsApp, o de haber sido mal informados por comunicaciones erróneas.

El fenómeno ha llevado a que comentaristas israelíes de primera línea pidan que se deje de confiar en informaciones no autorizadas sobre víctimas. Con la esperanza de controlar la información, el Ejército ha confiscado los teléfonos a las tropas enviadas al combate.

"Notificar a la familia de un soldado u oficial que ha muerto en acción es uno de los procedimientos más delicados y mejor planificados que existen", dijo el Ejército en un comunicado que anunciaba los arrestos, después de una investigación en la que dijo que se habían empleado "tanto fuentes abiertas como medios encubiertos".

"Los mensajes no autorizados de WhatsApp fueron irresponsables y se extendieron rápidamente a través de las redes sociales", dijo el comunicado, refiriéndose a la aplicación WhatsApp de la empresa Facebook.

El Ejército ha revisado su propia información oficial en relación a un soldado que inicialmente se informó como muerto en Gaza el domingo, pero que después fue considerado desaparecido en acción. Hamas dijo que había capturado al soldado, pero no hizo públicas fotografías.

ae