Una alta funcionaria del Departamento de Defensa de Estados Unidos dijo este jueves que Nigeria fue demasiado lenta en su respuesta a la amenaza de Boko Haram, pero que Washington está comprometido con la lucha contra los militantes islamistas y el rescate de más de 200 niñas capturadas hace un mes.

Funcionarios estadounidenses dijeron que los esfuerzos por recuperar a las jóvenes son ahora una prioridad, pero fueron complicados por la renuencia inicial de Nigeria a aceptar ayuda y las normas estadounidenses que prohíben la asistencia a fuerzas extranjeras que hayan cometido abusos de derechos humanos.

"En general Nigeria no consiguió llevar adelante una campaña efectiva contra Boko Haram", dijo Alice Friend, la directora de asuntos africanos del Pentágono, durante una audiencia ante un subcomité para Africa del Panel de Relaciones Exteriores del Senado.

"El Departamento ha estado profundamente preocupado durante cierto tiempo respecto de cuánto se resistió Nigeria a tomar el pulso de las crecientes capacidades de Boko Haram", sostuvo.

Friend consideró además como "alarmantes" las atrocidades perpetradas por algunos efectivos nigerianos en operaciones contra Boko Haram.

Robert Jackson, secretario de Estado adjunto para asuntos africanos, dijo que Washington ha instado a Nigeria a reformar su enfoque hacia el grupo. "Cuando los soldados destruyen aldeas, matan a civiles y detienen a personas inocentes con impunidad, la desconfianza se va profundizando" , indicó.

La embajada estadounidense en Abuya ofreció ayuda inmediatamente después del secuestro, pero ésta fue aceptada recién el 4 de mayo. Friend dijo que los vuelos de reconocimiento estadounidenses sobre territorio nigeriano comenzaron días después.

Funcionarios estadounidenses consideran que Boko Haram es una amenaza regional que se está convirtiendo en una internacional, con vínculos con la red militante Al Qaeda.

ahd