Las Fuerzas Armadas venezolanas ratificaron ayer su respaldo al presidente Nicolás Maduro, un día después de que el mandatario anunciara la detención de tres generales acusados de conspirar en contra del gobierno.

Los militares emitieron un comunicado jurando su respaldo a Maduro, quien había denunciado un presunto complot golpista de tres generales de la Aviación, a quienes hasta ayer no había identificado. “Frente a estos hechos la Fuerza Armada Nacional Bolivariana se mantiene monolítica”, expresó la nota oficial del alto mando militar.

“Se presentó una situación con tres oficiales generales, se procedió inmediatamente al ser detectados a tomar las acciones en el marco de nuestra normativa legal”, agregó el comunicado, según el cual los tres uniformados quedaron en privación de libertad.

El comunicado se dio a conocer el mismo día en que la suspendida diputada opositora María Corina Machado regresó a Venezuela con la convicción de que “sigo siendo diputada”. Machado, suspendida por la Asamblea Constituyente tras haber aceptado la invitación de Panamá para hablar en su lugar ante la Organización de Estados Americanos (OEA), en Washington, llegó procedente de Lima y fue recibida por medio millar de personas en el Aeropuerto de Maiquetía.

Por la tarde lideró una concentración en la Plaza Biron de Chacaito, donde advirtió que “ni Diosdado (Cabello, presidente de la Asamblea Nacional) ni nadie me quitarán el cargo de diputada”.

Junto a Machado se encontraban el alcalde de Caracas, Antonio Ledezma y Lilian Tintori, esposa de Leopoldo López, detenido desde hace un mes y a quien ayer la Corte de Apelaciones demoró un fallo sobre su posible libertad, por 24 horas más.

En un artículo de opinión que ayer publicó el diario estadounidense The New York Times, López calificó de “vergonzoso silencio” el que mantienen los países Latinoamericanos con respecto a la crisis que atraviesa Venezuela.

Para López, detenido tras una manifestación en la Plaza Biron que terminó con tres muertos el pasado 12 de febrero, los países de la región se han convertido en “cómplices de la espiral descendente del sistema político de Venezuela”.

La oposición no fue la única que tomó las calles este jueves. El chavismo aprovechó un nuevo aniversario (20 años) de la salida de la cárcel del Yare del extinto líder Hugo Chávez para realizar una demostración de fuerza en la capital.

La manifestación fue presidida por el presidente Maduro, quien llamó a los venezolanos a no bajar “la guardia, ante este golpe de Estado continuado”. Rechazó además la propuesta que hizo la alianza opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) para que una misión de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) funja como mediador, a fin de superar la crispación política por las protestas contra el gobierno. “Yo digo que para reunirme con la MUD necesito un notario público para que escriba todo lo que dicen. No tienen palabra”.

Añadió que si los militares presos son hallados culpables, “voy a aplicar la ley más severa para castigarlos”. El mandatario acusó a Rocío San Miguel, directora de la ONG local Control Ciudadano, de ser parte del presunto complot golpista.

Maduro anunció que el Consejo Nacional Electoral convocará a elecciones para sustituir a los alcaldes de dos municipios que fueron destituidos el martes por desacatar una orden judicial que los instaba a acabar con las protestas contra el gobierno.

(Con información de agencias)