El Gobierno español esperará a conocer el informe de los inspectores de Naciones Unidas sobre el uso de armas químicas en Siria y los acuerdos de la comunidad internacional antes de adoptar una decisión sobre una eventual intervención en ese país.

La vicepresidenta del Ejecutivo español, Soraya Sáenz de Santamaría, explicó hoy a la prensa que el Gobierno mantiene estos días un diálogo con los aliados, tanto a nivel bilateral como en el seno de los organismos internacionales, como la OTAN.

Mostró su preocupación por el uso de armas químicas y recordó que la posición de la diplomacia española consiste en subrayar que los ataques con armas químicas en Siria requieren una respuesta firme de la comunidad internacional.

Expresó su confianza en que el Consejo de Seguridad de la ONU pueda tomar decisiones que hagan que la legalidad internacional se cumpla y termine el drama sirio, donde los enfrentamientos han generado víctimas y numerosos desplazados.