Las Fuerzas Armadas egipcias advirtieron hoy de que proseguirán sus operaciones hasta lograr acabar con el terrorismo, después de que un atentado con coche bomba se cobrara la vida de diez soldados en el norte de la península del Sinaí.

"La valiosa sangre de nuestros hombres solo aumentará nuestra perseverancia para limpiar Egipto y proteger a su pueblo de la violencia y el terrorismo traicionero", aseguró el portavoz militar, Ahmed Ali.

En un comunicado, Ali subrayó la decisión del Ejército de continuar su guerra contra terrorismo "hasta eliminar totalmente a los que promueven la oscuridad, la discordia sectaria y el extremismo".

Las fuerzas de seguridad han lanzado numerosas operaciones militares contra los grupos extremistas que han ganado fuerza en el Sinaí, especialmente desde julio pasado, tras el golpe militar contra el presidente islamista Mohamed Mursi.

El portavoz castrense explicó que el atentado, perpetrado por suicidas, ocurrió hoy a las 07.45 hora local (05.45 GMT) en la zona Al Shalaq, al oeste de Sheij Zaued.

La explosión también causó heridas a 35 soldados, muchos de los cuales se encuentran en estado grave y han sido trasladados a hospitales militares.

Las autoridades egipcias han cortado las comunicaciones de internet y telefónicas en el norte del Sinaí, donde el Ejército se encuentra en estado de alerta.

Por el momento ningún grupo ha asumido la autoría de este atentado, aunque ataques similares del pasado han sido reivindicados por "Ansar Beit al Maqdis" (Seguidores de la Casa de Jerusalén).

Este grupo yihadista sí ha reivindicado en las últimas horas el asesinato hace tres días en El Cairo de un teniente coronel de la Seguridad Nacional, Mohamed Mabruk, responsable de realizar el seguimiento de "grupos extremistas" y de los Hermanos Musulmanes.

La nota de "Ansar Beit al Maqdis" advirtió de que han comenzado a asesinar a los "más peligrosos criminales y enemigos de los musulmanes" como castigo por el arresto de mujeres durante las protestas islamistas.

jram