Una acción militar en Siria intensificaría el sufrimiento de la población que permanece dentro del país y alejaría una solución negociada a la guerra civil, dijo hoy la comisión investigadora de la ONU sobre los crímenes perpetrados en ese país.

Este grupo de prestigiosos juristas divulgó hoy su último informe sobre la situación en Siria, que cubre el periodo del 15 de mayo al 15 de julio pasados, en el que acusa tanto a las fuerzas gubernamentales como a los grupos armados opositores de "crímenes de guerra".

Revela también que grupos armados kurdos se han convertido en actores importantes en este conflicto y reclutan niños y los utilizan como soldados en las hostilidades.

La comisión también afirma que aquellos que suministran armas a las partes beligerantes en la guerra civil crean en ellas una ilusión de victoria.

"No hay solución militar", aseguran los juristas que integran este equipo, encabezado por el brasileño Sergio Pinheiro.

La divulgación de este informe ocurre en la víspera de una reunión crucial entre los responsables de Asuntos Exteriores de Estados Unidos y Rusia, en Ginebra, para intentar acordar un procedimiento que ponga bajo supervisión internacional las armas químicas que posee el régimen sirio.

ahd