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Ya casi repuesto de la lesión que lo alejó de la canchas por varias semanas, el delantero de Cruz Azul, Jerónimo Amione, lamentó que tengan que ir a jugar a la filial del equipo, donde nadie quiere estar.

"Nadie quiere jugar allá, pero fueron decisiones que tomó el entrenador y también me tocó la mala suerte esa lesión", manifestó el jugador a su salida de las instalaciones del club en La Noria, tras la práctica del equipo.

Sin estar todavía en condiciones de poder estar en el partido del sábado contra Xolos de Tijuana en el estadio Azul, dijo que le dolió haberse lastimado por haber ido a Cruz Azul Hidalgo, pero que son decisiones del club.

"Me duele haberme lesionado, pero es parte de las decisiones del club, me mandaron allá para tener participación y desgraciadamente se dio la lesión, es triste pero Cruz Azul Hidalgo es parte del club y hay que seguir las indicaciones", dijo.

Ahora, luego de tres semanas en recuperación del problema que tuvo en la rodilla derecha, aseguró estar contento porque las posibilidades de volver a jugar están cerca, pero que aún deberá esperar una semana más.

"Contento de que después de tres semanas y media ya estoy casi al parejo de poder trotar y correr, pero hay que esperar una semana más para poder estar con el equipo. Espero que de este lunes al otro ya pueda estar, para ser tomado en cuenta".

mcs