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El festejo del centenario del natalicio del escritor José Revueltas (Santiago Papasquiaro, Durango- 20 de noviembre de 1914) en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara comenzó con un aplauso en recuerdo a los 43 normalistas desaparecidos en Ayotzinapa.

"A José Revueltas le habría indignado lo que está sucediendo ahora en nuestro país", expresó la escritora Elena Poniatowska, quien junto con el escritor Jaime Labastida, ofreció una semblanza del autor de "El Apando".

La ceremonia en recuerdo de ese hombre que soñaba con la justicia social y "llevaba inscrito en el apellido su destino" también se tiñó de luto al recordar al escritor Vicente Leñero, fallecido este miércoles en la ciudad de México. Poniatowska pidió un minuto de silencio en memoria del también periodista y dramaturgo.

En seguida, la ganadora del Premio Cervantes de Literatura 2013 habló de la militancia de José Revueltas, su compromiso social, la cercanía que tuvo con los jóvenes de su época, principalmente quienes participaron en el movimiento estudiantil del 68. "A pesar de su edad y de todas las críticas, apoyó durante los 146 días del movimiento al Comité de Lucha de la Facultad de Filosofía y Letras, protegió a Alcira, la uruguaya que permeció encerrada en el baño de mujeres cuando el ejército entró a Filosofía y Letras, apoyo a jóvenes que en la calle habían sido amenazadas", recordó.

La autora de "La noche de Tlatelolco" también destacó al José Revueltas enamoradizo, pasional y que supo amar a las mujeres: "Si hubo un hombre que supo amar a las mujeres, o a una sola mujer entre todas las mujeres, o a todas las mujeres en una sola, o a muchas pero cada una en su tiempo, ese fue José Revueltas".

"Siempre me maravillaron las apariciones que hacía de sus mujeres en su literatura", agregó la también periodista.

Por su parte,Marisol Schulz, directora de este encuentro literario, señaló que Revueltas marcó a su generación con sus luchas y lo sigue haciendo hoy en día con las generaciones que siguen a su obra. "Fue un revolucionario que no necesitó de las armas para lograr un cambio a su alrededor. Él, con pluma e imaginación soberana, logró más que los fusiles y los explosivos", dijo.

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