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Gabriel García Márquez escribía una obra antes de morir llamada “En agosto nos vemos”, misma que no se descarta pueda ser publicada de manera póstuma, según dio a conocer Cristóbal Pera, de la casa editorial Random House.

Pera llegó ayer al domicilio del escritor con su esposa e hijos. “Como editores de García Márquez, venimos a dar el pésame a la viuda y los hijos”, mencionó. Horas más tarde, el editor se retiró de la casa y comentó que los familiares del escritor colombiano se encuentran “enteros, pero muy tristes”.

No descartó que la obra “En agosto nos vemos”, y que al parecer editó García Márquez en los últimos momentos de su vida, pudiera ser publicada de forma póstuma, aunque dijo que “la decisión será de la familia”.

Santos vendrá a homenaje

Además, ayer se confirmó que el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos Calderón, asistirá al homenaje que se le rendirá mañana lunes al fallecido escritor, en la Ciudad de México.

“El lunes viajaremos a México para asistir al homenaje a Gabo, el colombiano más grande de todos”, escribió el mandatario este sábado en su cuenta de Twitter.

El desplazamiento de Santos a territorio mexicano había sido anunciado la víspera por el embajador colombiano en este país, José Gabriel Ortiz, quien informó que el jefe de Estado llegará a México horas antes de que comience el homenaje.

Adelantó que el mandatario colombiano, primero, dará un saludo a la esposa y a los hijos del fallecido Nobel de Literatura 1982 y luego se trasladará al Palacio de Bellas Artes para asistir al acto junto con su colega mexicano, Enrique Peña Nieto.

El Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) señaló que los restos del escritor colombiano fueron incinerados en privado, a petición de la familia.

El embajador comentó que el destino final de las cenizas de García Márquez no está decidido todavía, aunque todos los lugares importantes en la vida del escritor sueñan con conservar, al menos, una parte de sus restos.

“Es una decisión estrictamente de la familia, tremendamente privada e íntima y nosotros como gobierno no nos vamos a pronunciar hasta que la familia no tome una decisión oficial y todavía no lo ha hecho”, mencionó el embajador colombiano.

Aclaró que la decisión de que se repartan entre México y Colombia sus restos no es un hecho, sino “el deseo de todo el pueblo colombiano, empezando por el presidente Juan Manuel Santos.

“Todos queremos que parte [de sus restos] reposen allí, porque Gabo escribió una parte muy importante de su obra en México, pero nunca dejó de ser colombiano y es una de nuestras grandes glorias, pero la familia tomará la decisión que les convenga, quieran y sientan”, puntualizó el diplomático.

Pésame de ex mandatario

En tanto, el ex presidente de México, Carlos Salinas de Gortari, acudió ayer a visitar a la familia del fallecido escritor. La presencia del político levantó revuelo entre los reporteros que se encontraban de guardia afuera de la casa del Nobel de Literatura.

En un breve encuentro con los medios de comunicación, el ex mandatario indicó que el autor de Cien años de soledad fue un hombre a favor de la armonía, la concordia y el respeto a la diversidad.

Salinas permaneció con la familia García Barcha alrededor de dos horas, al salir comentó a la prensa: “Dentro de esta tristeza que tenemos todos, me alienta encontrar a la familia siempre unida, sin duda, pero también conmovida por el homenaje mundial que se le ha dado a este hombre universal que es Gabriel García Márquez”.

“Era fiel a sus principios y leal a sus amigos”, afirmó el ex gobernante de México, quien llegó a pedir la ayuda de Gabo para poner en contacto al presidente de Cuba, Fidel Castro Ruz, y al estadounidense Bill Clinton, en agosto de 1994.

“Tenía la cualidad de buscar la concordia”, mencionó Salinas de Gortari al recordar el papel que tuvo García Márquez en aquel momento, cuando surgió la llamada “crisis de los balseros”.

“El Gabo era una gente que siempre tenía la cualidad de sumar. No es que se acercara al poder, es que el poder se acercaba a él”, enfatizó.

Consultado sobre qué cree que pasará con sus cenizas, comentó que la decisión tendrá que ser de la familia y todos tendrán que respetarla.

“Él no se fue, él está aquí, pero lo vamos a extrañar”, aseveró el ex mandatario.

Más tarde, Jaime García Márquez, hermano del escritor, arribó procedente de Cartagena a la casa localizada en el número 144 de la calle Fuego, en Jardines del Pedregal, para reunirse con el resto de la familia.

Jaime llegó acompañado por el poeta José Luis Díaz Granados, quien viajó desde Bogotá, Colombia.

Mañana lunes, a partir de las 16:00 horas, se realizará un homenaje luctuoso en el Palacio de Bellas Artes, donde el público podrá celebrar su legado, y se espera la presencia de los presidentes de Colombia y México. (Con información de agencias)