Luego de más de medio siglo de su estreno en 1952, se volvió a presentar la ópera Atzimba en Durango, como parte de la celebración por los 150 años del compositor mexicano Ricardo Castro.

Rafael Tovar y de Teresa, presidente de Conaculta, y el gobernador del estado de Durango, Jorge Herrera Caldera, acompañados por María Cristina García Cepeda (directora del INBA); colocaron poco antes de la función una ofrenda floral ante la estatua de Ricardo Castro, que se encuentra en la esquina del teatro que lleva su nombre.

De acuerdo a información difundida por el INBA, la obra se basa en un episodio de La conquista de Michoacán, de Eduardo Ruiz y se integra por tres actos, teniendo como personajes principales a la princesa purépecha Atzimba, al oficial español Jorge de Villadiego y al guerrero Huépac, quien revela su amor por la noble joven de quien descubre que tiene amoríos con el conquistador español.

La pieza se estrenó por primera vez el 20 de enero de 1900 en el Teatro Arbeu como una zarzuela que fue adaptada al italiano debido a que la compañía italiana se le dificultaba cantar en español, según lo documentaron Arturo Márquez y Abelardo Olivera. 

El montaje contó con la dirección de Enrique Patrón de Rueda, la dirección de escena de Antonio Salinas, el asesoramiento de Luis de Tavira y la orquestación en el segundo acto del compositor Arturo Márquez.

Atzimba reúne en la voces a Olivia Gorra, José Luis Duval, Rufino Montero, Armando Gama, Carlos Sánchez y Ana Caridad Acosta, además del acompañamiento de la Orquesta Filarmónica de Durango, el ensamble Coral del Instituto de Cultura del Estado de Durango y el Coro de Guillermo Sarabia.

sc