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Matan a tiros a esposos afuera de su casa en Xochimilco

Allan López Sosa| El Universal
09:08CIUDAD DE MÉXICO | Jueves 29 de agosto de 2013
Los cuerpos de las vctimas quedaron tendidos a las puertas de lo que fuera su hogar. Dejan hurfano

CON ARMAS LARGAS Los cuerpos de las víctimas quedaron tendidos a las puertas de lo que fuera su hogar. Dejan huérfanos a seis jóvenes, uno de los cuales resultó herido en el ataque. (Foto: ESPECIAL )

Un joven de 18 años, hijo del matrimonio, también resultó herido de gravedad; los presuntos atacantes usaron un 'cuerno de chivo' para perpetrar el ataque

"Un cuerno de chivo" dejó huérfanos a seis jóvenes de la delegación Xochimilco. El papá y la mamá de la familia Pineda Salazar fueron asesinados en la puerta de su casa, mientras que uno de sus hijos resultó con graves lesiones.

La mañana de ayer, Raynold Pineda, de 57 años, se dirigía a su domicilio localizado en la calle Miguel Hidalgo, en la colonia San Francisco Chiquimola, presuntamente a bordo de un taxi.

Después de estacionar su unidad, el hombre se bajó para tratar de entrar a ver a sus hijos y esposa; sin embargo, su camino fue detenido por los ocupantes de un Tsuru que se pararon frente a él.

Testigos comentaron que al menos dos sujetos viajaban en el carro blanco, mismos que al encarar a Pineda comenzaron a gritarle. La discusión fue silenciada por una ráfaga de balas de un rifle AK-47, mejor conocido como "cuerno de chivo". Los tripulantes del Tsuru habían herido a Reynold en el pecho, por lo que éste perdió la vida instantáneamente.

Tras escuchar las detonaciones, el hijo y esposa de la víctima salieron de su casa para ver lo que ocurría. El primero en llegar fue Eduardo Pineda, de 18 años, quien vio a su padre tirado casi en la esquina con calle Capulín. Al encontrar aún a los agresores, éstos dispararon al joven en el abdomen y la mejilla derecha. Luego salió su mamá, la señora Bertha Salazar, de 56 años, quien corrió con la misma suerte.

Tras el crimen, los hampones subieron al auto para huir, al tiempo que vecinos llamaban a los servicios de emergencia. Paramédicos certificaron la muerte de los jefes de familia. Cuando valoraron a Eduardo se dieron cuenta que éste aún tenía signos vitales, por lo que fue llevado al deportivo Xochimilco.

Hasta ese lugar descendió un helicóptero de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina, que lo trasladó al hospital Xoco, donde fue reportado como grave.

En el sitio del crimen peritos de la Procuraduría General de Justicia capitalina iniciaron las indagatorias. Ahí encontraron al menos 10 casquillos percutidos de una arma calibre 7.62 milímetros.

Por las características del crimen, autoridades investigan un ajuste de cuentas, aunque colonos de la comunidad comentaron que Raynold era una persona amable y sin conflictos.

dm



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