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Para la escritora sudafricana Nadine Gordimer, Carlos Fuentes ha cumplido con la tarea de un escritor, con el lugar que ocupa como testigo de los hechos que le tocan vivir.

“El libro que Carlos Fuentes ha ido construyendo a lo largo de su vida, que abarca un relato constante en más de 40 libros y al que hoy tengo el honor de rendir mi ilimitada admiración y homenaje, es la obra de un gran maestro del testimonio interior. En su osadía intelectual y su gran registro —por los que cada volumen sucesivo evoluciona a partir del interior, avanza más lejos y se agrega a lo que será la obra máxima— se encuentra la profundidad que alcanza Fuentes en su exploración del misterio de la vida como la experimentan y construyen los seres humanos”, dijo Gordimer.

La ganadora del Premio Nobel de Literatura 1991 afirmó que desde La región más transparente y La muerte de Artemio Cruz hasta su más reciente novela, Carlos Fuentes reproduce el poder del testimonio interior como un avance singular en el arte literario; y aunque no ha leído La voluntad y la fortuna, “porque aún no ha sido publicada en inglés”, ella espera una nueva revelación de las posibilidades de la palabra escrita y que Carlos Fuentes cumpla lo que pedía Franz Kafka, “el escritor ve entre las ruinas más cosas y más distintas, que las que ven los demás; ve lo que en realidad está sucediendo”.

La escritora habló del escritor como testigo y del testimonio interior que debe dar en su literatura, al plasmar las vidas individuales de los hombres, mujeres y niños que deben conciliar en su interior las certidumbres hechas trisas y los valores humanos que son víctimas del tiempo.