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Julio Camarena Villaseñor, oficial mayor de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), dijo que la cancillería insistirá en una política de adquisición de inmuebles fuera del país para ocuparlos como embajadas, consulados y misiones, y así disminuir los costos que paga por concepto de rentas de inmuebles.

Ayer, EL UNIVERSAL informó que la SRE gastó mil 500 millones de pesos anuales en el pago de rentas y servicios de las embajadas y consulados.

En entrevista, el oficial mayor Camarena Villaseñor precisó que durante 2010 se pagaron mil 681 millones de pesos, no sólo por rentas, sino por la operación general de las delegaciones, entre lo que se incluye el costo del arrendamiento, el pago de sueldos al personal local, de materiales de consumo, de los servicios básicos y gastos de orden social.

Estos costos, explicó Villaseñor, pertenecieron en su mayoría al pago de personal local, los cuales ascendieron a 795.4 millones de pesos.

Para la renta de inmuebles se erogaron 372.2 millones de pesos; para servicios básicos, 84.1 millones; para materiales de consumo, 70.7 millones; para gastos de orden social, 53.5 millones, y en “otros” se erogaron 305.4 millones de pesos, dando una suma total de mil 681.4 millones de pesos.

El diplomático dijo que con el fin de pagar menos arrendamientos, la Cancillería tenía planeada la compra de 12 nuevas sedes diplomáticas, pero éstas no se concretaron debido al plan de austeridad aplicado por el gobierno federal durante los años 2009 y 2010.

En cuanto a las recientes adquisiciones, el funcionario dijo que se compraron las sedes diplomáticas de México en China y en Japón, y agregó que la SRE insistirá en retomar el plan de adquisiciones, porque eso “ayuda a ahorrar”.

Para generar ahorros, el oficial mayor explicó que se fusionaron o cerraron diversas sedes fuera de México.

Un caso fue la fusión de la representación de México en la UNESCO con la embajada de Francia, así como la integración en un solo inmueble del consulado de Guatemala con la embajada del mismo país.

Además, se cerraron las representaciones de Angola, Paquistán y los consulados de Guayaquil en Ecuador y Porto Alegre en Brasil.

Ahorro de 3.4 mdd

Con estas fusiones y el cierre de sedes diplomáticas se logró un ahorro por 3.4 millones de dólares en un año.

De acuerdo con la cancillería, también se lograron ahorros importantes en otros rubros, como la reducción de 5% de las plazas de las direcciones generales adjuntas, que significaron un ahorro de 35.6 millones de pesos por año, así como la reducción en 6% en todas las unidades de Oficialía Mayor de la SRE, lo cual generó ahorros por 20 millones de pesos por año, dijo Camarena.

Comentó que el presupuesto anual de la dependencia autorizado por la Cámara de Diputados para 2010 fue de 5 mil 700 millones de pesos. Sin embargo, se alcanzó la cifra de 9 mil 460 millones de pesos debido a que muchos de los recursos fueron generados por la por la misma dependencia.

Sobre el costo que se paga por el arrendamiento de las sedes diplomáticas en el exterior, el funcionario federal explicó que muchas veces se tienen que pagar rentas elevadas, ya que los inmuebles se encuentran en las zonas céntricas o con mayores vías de acceso en las ciudades del extranjero, por lo que los costos son mas altos que los que se cobran en los suburbios de las ciudades.

Camarena dijo que también se toma en cuenta que deben ser “lugares dignos”, agregó.

Indicó que hay países como el Reino Unido, donde México no puede comprar un inmueble, porque la política de esa nación lo impide.