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Confirman muerte de agentes de PGR

Jorge A. Medellín, Dora Elena Cortés y Manuel Cordero/Reportero y Corresponsales| El Universal
Jueves 13 de abril de 2000
Confusión en causas. Huellas de tortura, señala Herrán; accidente, dicen en BC. Les practican una segunda necropsia

El fiscal antidrogas, Mariano Herrán Salvatti, aseguró que la muerte de los tres investigadores de la PGR desaparecidos el pasado lunes 10 en Baja California se derivó de hechos violentos, ya que sus cuerpos presentan ?huellas de tortura?.

Sin embargo, la versión oficial del titular de la FEADS contrasta con la del Servicio Médico Forense (Semefo) en Baja California y la del segundo comandante de la Policía Federal Preventiva, quienes aseguran que la muerte de los tres investigadores se debió a un ?accidente automovilístico por exceso de velocidad?.

Ante la confusión sobre las causas de la muerte de los investigadores, EL UNIVERSAL consultó a fuentes de la PGR quienes aseguraron que desde la tarde de ayer peritos efectúan una ?renecropsia? para determinar con exactitud lo que sucedió.

Los funcionarios investigaban al cártel de los Arellano Félix.

Asimismo, realizaban pesquisas sobre el asesinato del abogado Gustavo Gálvez, defensor de Jesús Labra, ?cerebro financiero? de dicha organización.

Los investigadores fallecidos son el director general del Ministerio Público Federal Especializado en Delitos contra la Salud, José Patiño Moreno; el agente del Ministerio Público Federal, Óscar Pompa Plaza, asistente en investigaciones antidrogas, y el capitán Rafael Torres Bernal, primer subcomandante de la Policía Judicial Federal en Baja California.

De acuerdo con el director estatal del Semefo, Francisco Acuña Campa, ?todo parece indicar que se trató de un lamentable accidente?, ya que los cadáveres ?no presentan huellas de arma de fuego o de arma blanca?.

Sin embargo, más tarde Acuña Campa modificó su versión y estableció que no puede descartar que la muerte haya sido provocada por golpes que les pudieron ser infligidos antes del presunto accidente.

Advirtió que resulta preculiar que los tres hayan fallecido por traumatismo craneoencefálico, lo que habla de golpes con objetos contundentes, no filosos, cuando el fallecimiento por un accidente carretero provocaría diferentes tipos de lesiones en cada una de las víctimas.

En tanto, el segundo comandante de la Policía Federal Preventiva (PFP) en la entidad, José María Gómez Verdugo, refirió que el accidente se dio como consecuencia de un exceso de velocidad en una zona cuyo máximo permitido es de 60 kilómetros por hora, ?e iban a más de 100. ¿Por qué iban corriendo?, eso ya no podemos determinarlo?.

Los cuerpos fueron hallados en la madrugada del martes por agentes policiacos estadounidenses y mexicanos, luego de que un par de desvalijadores de autos los encontraron diseminados unos 20 metros en un barranco de 200 metros de profundidad.

Así, en las primeras horas luego del hallazgo de los cuerpos, las versiones sobre lo sucedido son contradictorias.

Mientras el fiscal antidrogas Mariano Herrán aseguró que José Patiño Moreno, Óscar Pompa Plaza y el capitán Rafael Torres Bernal fueron asesinados, el titular del Semefo y el responsable de la PFP en Baja California mantienen sus versiones.

El peritaje de la Federal Preventiva estableció que ?los elementos viajaban a exceso de velocidad, en una curva cerrada descendente a la derecha?.

Por las huellas de frenado ?se puede determinar que iban a casi 100 kilómetros por hora?. El peritaje indica que no se encontraron huellas de choque con ningún otro vehículo.

Los tres funcionarios estaban adscritos a la Fiscalía Especializada en Atención de Delitos contra la Salud (FEADS), y tenían a su cargo la investigación especial de los cárteles de la droga en el norte del país, en particular los de los hermanos Arellano Félix y Campos Salcido.

Una de las líneas de investigación en la que avanzaban era la referente a la ubicación de al menos 60 propiedades de los Arellano, cuatro de las cuales ya habían sido cateadas en los primeros meses de este año.

Los funcionarios formaban parte de los 73 elementos de la PGR enviados especialmente a Baja California (51 agentes de la Policía Judicial Federal, seis de la Unidad Especializada en Delincuencia Organizada, y seis más del Ministerio Público especial en delitos contra la Salud) para tratar de desmantelar al cártel de los Arellano.

Al momento de su desaparición, los investigadores de la FEADS realizaban indagaciones en torno del asesinato de Gustavo Gálvez, abogado de Jesús Labra Avilés, ?El Chuy?, identificado por la PGR como el ?cerebro financiero? del cártel de los Arellano y quien está arraigado desde hace tres semanas para ser investigado.

Los detalles del posible triple asesinato fueron proporcionados ayer por el fiscal antidrogas Mariano Herrán Salvatti, por el coordinador de Investigaciones de la FEADS, José Luis Santiago Vasconcelos, y por el general Oliver Cen, director de Operaciones de la misma fiscalía en el Centro Nacional de Planeación para el Combate a las Drogas (Cendro).

En conferencia de prensa, Herrán Salvatti lamentó la muerte de los tres investigadores que desde el 1 de marzo habían sido enviados a Tijuana para indagar las operaciones de los cárteles de la droga y en particular el asesinato del abogado Gálvez, quien fuera defensor de ?El Chuy? Labra Avilés.

La labor de Patiño Moreno, a la sazón director general del Ministerio Público Especializado en Atención de Delitos contra la Salud, era apoyada por Rafael Torres Bernal, quien fue enviado por la Secretaría de la Defensa Nacional a la PGR en 1997 con el fin de integrarse a las investigaciones de la FEADS.

Bernal, quien pertenecía a la Sección Especial Antidrogas del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (GAFE) del Ejército mexicano, alcanzó el grado de capitán en 1999 por sus servicios a la PGR.

Al momento de su desaparición se desempeñaba como primer subcomandante de la Policía Judicial Federal (PJF) en Tijuana, Baja California.



?Exceso de confianza?

¿Qué ocurrió?, ¿por qué fueron ejecutados los investigadores de la FEADS?, se le preguntó al general Oliver Cen.

La respuesta, aunque escueta, fue contundente: ?Desde luego nuestros agentes están adiestrados, reciben el entrenamiento durante su formación y están en condiciones de garantizar su propia seguridad.

?Lo que en ocasiones ocurre, es un exceso de confianza, descuidos en la periodicidad. ?La rutina de trabajo hace que en ocasiones tomemos confianza en nuestros propios actos, esto eventualmente acarrea consecuencias fatales, pero en lo personal (los agentes) están plenamente entrenados, tienen su capacitación y pueden garantizarse su propia seguridad?.

Mariano Herrán explicó que los tres investigadores de la FEADS vivían en la ciudad de San Diego, ?por razones de seguridad y por el constante intercambio de información antidrogas con otras agencias norteamericanas?.

La señal de que algo andaba mal surgió, dijo, cuando José Patiño Moreno, Óscar Pompa y el capitán Bernal no acudieron a una diligencia en la Mesa de Otay programada para las 10 de la mañana del pasado lunes.

Ésta se relacionaba con la indagatoria sobre el caso del abogado Gálvez e involucraba también los avances en la ubicación de más de 60 propiedades de los hermanos Arellano Félix.

De éstas, cuatro habían sido cateadas en los primeros meses de este año.

Mariano Herrán aseguró que a pesar del asesinato de los investigadores, hallados en el fondo de un barranco a las afueras de Tijuana, la PGR seguirá adelante en la labor de desmembrar a la organización de los Arellano.

Manifestó que en las pesquisas también participan activamente las agencias antidrogas de Estados Unidos, e insistió en que lo sucedido no afecta en nada los avances de la investigación contra uno de los cárteles más poderosos del país.

Por la tarde de ayer, Mariano Herrán se trasladó a la ciudad de Oaxaca en donde hará un seguimiento de las investigaciones contra el comandante Virgilio Ojeda Osorio, señalado por supuestos vínculos con los hermanos Arellano Félix y declarado prófugo de la justicia desde hace una semana. (Con información de Ismael Sanmartín, corresponsal).

SECUELA MORTAL

Homicidios ocurridos tras la captura de Jesús Labra, "cerebro financiero" del cártel de Tijuana

15 de marzo. Encuentran en el DF el cadáver de Gustavo Gálvez Reyes, abogado de Labra Avilés.

23 de marzo. La policía capitalina descubre un cadáver, identificado días después como ex agente judicial de Baja California.

12 de abril. La PGR encuentra en BC los cuerpos sin vida de dos agentes del Ministerio Público y de un comandante.



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