CULIACÁN, Sin. No obstante que su difusión en los medios está cancelada, los narcocorridos han recobrado un auge que, incluso, ha provocado que radiodifusoras tengan que retransmitirlos. Como si el estigma de ser cuna y cultura del narcotráfico no fuera suficiente para Sinaloa, esta entidad es además sede de los principales grupos musicales norteños que, en sus corridos, reseñan vida y muerte de los capos de la droga, a quienes presentan como héroes, triunfadores y merecedores de perpetuidad.

En febrero pasado la Cámara de la Industria de la Radio y la Televisión (CIRT) decidió cancelar la difusión en medios electrónicos de la música que hace apología de la violencia, narcotráfico, drogadicción y alcoholismo, para coadyuvar en la reducción de los niveles de inseguridad.

Empero, los llamados narcocorridos mantienen su difusión en fiestas pueblerinas, o por medio de casetes y compact disc (CD) de uso doméstico, sobre todo entre la población juvenil, incluso en territorio estadounidense.

Los narcocorridos se han convertido en la industria musical más próspera de la última década y en ellos se glorifica la figura de los hombres que cultivan, cosecha y trafican con la adormidera y la mariguana que florecen en el "Triángulo Dorado" formado por Chihuahua, Sinaloa y Durango.

Durante la gubernatura de Francisco Labastida Ochoa (1987-92) se dio un primer esfuerzo por desterrar ese género musical de la radio y la televisión.

Sin embargo, aquél cobró mayor auge vía casetes grabados por pequeñas empresas locales, que pronto los colocaron en exhibidores de toda clase de comercios, desde humildes abarrotes hasta estaciones de gasolina.

La prohibición de su difusión masiva provocó el morbo y establecimientos cercanos a mercados tradicionales de Sinaloa colocaron bocinas en las calles, a todo volumen, para atraer clientes deseosos de conocer por los corridos los nombres de los narcos caídos por las balas de sus enemigos o en enfrentamientos con la policía y el Ejército.

Poco después las empresas radiofónicas volvieron a tocarlos.

Sin duda, los Tigres del Norte y los Intocables del Norte son los grupos precursores de los narcocorridos, como lo demuestran los estrenos, en 1971, de temas como "Camelia la Texana" y la "Banda del Carro Rojo", que tratan de un viaje a Tijuana para entregar una carga de droga.

Araceli de la Torre Barrón, investigadora de este fenómeno musical en la Universidad Autónoma de Sinaloa, asegura que los corridos han extraviado su esencia para hacer apología de la criminalidad y la violencia.

Con grados de maestría en Lingüística y doctorados en Artes y Filología, Torre Barrón sostiene en su proyecto de investigación sobre la narcomúsica, de hace más de 15 años, que los contenidos exaltan la violencia, ya que en las historias los antihéroes terminan asesinados o en la cárcel.

Cantadas por grupos norteños como los Tigres del Norte, Los Tucanes de Tijuana, Los Coyonquis, Los Potros de Sinaloa, los Nuevos Cadetes de Linares, entre otros, las hazañas reales, ficticias o alteradas, son escuchadas con admiración por amplios sectores sociales.

Los falsos valores son aceptados como un símbolo de hombría. Tener una camioneta de lujo, dólares en los bolsillos y una pistola fajada en la cintura, es el sueño de muchos jóvenes, consideran los especialistas.

Jefes policiacos abatidos por las balas de los delincuentes también son recordados cada vez que los acordes de un grupo musical o un solista lanza al viento las coplas en las que se describe su valentía y arrojo para enfrentar a sus enemigos.

En reciente declaraciones a la prensa, Mario Quintero, integrante de Los Tucanes de Tijuana, originarios de Sinaloa, dijo sentirse incómodo y preocupado porque se dice que son voceros de los hermanos Arrellano Félix; aseguró que sólo cantan corridos de narcos porque la gente se los pide.

El líder local del Sindicato de la Industria de la Radio, Francisco Daniel Montijo asegura que la cultura de la criminalidad y la violencia se ve enraizada en esta entidad; considera así que además hay que dejar de transmitir las radionovelas.

Desde hace casi 30 años, en forma ininterrumpida, todos lo días alrededor de las 06:00 de la mañana, los radioescuchas sintonizan la radionovela "Porfirio Cadena (a) el Ojo de Vidrio", cuya trama principal son las traiciones y las muertes violentas de sus enemigos.

Los temas musicales alusivos a los trueques de drogas, traiciones y muertes por robos de mariguana o cocaína o venganzas por mujeres que abandonan, también son los más solicitados en los bailes de fines de semana en diversos puntos de la geografía sinaloense, cuyos asistentes se identifican con algunos de los antihéroes.

Una hora de música, ya sea con banda o grupo norteño cuesta entre cinco y nueve mil pesos, comenta Óscar Javier Torres Obeso, secretario general de la Sección XXXIV del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Música de la República Mexicana.

Dice que el narcocorrido está muy arraigado entre los habitantes de Culiacán y los músicos deben estar siempre atentos a las nuevas composiciones que surgen.

Rechaza no obstante que el florecimiento de muchas bandas musicales esté ligado a la inyección de dinero sucio hacia esta actividad, como pago por la difusión de corridos que hablan de los personajes de las drogas más buscados por las autoridades Guillermo Contreras Núñez, el más joven de una familia con una gran trayectoria en la locución, titular del programa "Fiesta Mexicana" en la estación local XECSI, considera que la disyuntiva es: ganar audiencia con la transmisión de las canciones que los radioescuchas solicitan, o diseñar programas para inculcar el buen gusto por la música.

Hoy, como en el pasado, se vuelve a retomar el acuerdo entre autoridades estatales y la CIRT, para una cruzada contra la delincuencia, mediante la cancelación de toda forma de difusión en medios electrónicos de música en la que se haga apología de la violencia, narcotráfico, drogadicción y alcoholismo, enfatiza Conteras Núñez.

Desde la muerte de Lamberto Quintero, en los años 70, cuya vida delictiva fue llevada a la pantalla del cine mexicano y su corrido fue difundido dentro y fuera del país por cantantes como Antonio Aguilar, las figuras de otros notables traficantes de drogas sinaloenses han cruzado rápidamente las fronteras.

?El día 28 de enero como me hiere esa fecha/ a don Lamberto Quintero le seguía una camioneta/ Iba con rumbo al Salado nomás a dar una vuelta/ Pasaron el Carrizal iban tomando cerveza/ un compañero le dice nos sigue una camioneta/ Lamberto le dice sonriendo para qué son las metralletas/ Ya cerquita del Salado rugen dos R-15/ ahí los dejan muertos, los enemigos de Lamberto.?

Para Ismael Barraza, compositor de la banda los Nuevos Coyonquis, su creatividad no busca convertir en héroes de piedra a personajes que se vuelven populares por sus actitudes, muchas de ellas al margen de la ley, sino tratar de hacer una radiografía de éstos y trasmitirla en sus canciones.

Dice que para la composición de un corrido recoge datos en periódicos, anécdotas y forma de vida en sus lugares de origen, para enriquecer el texto, y después busca un buen arreglo musical.

La industria de la música sobre traficantes de drogas ha encontrado una poderosa mina de ventas, sobre todo entre jóvenes del medio rural y pequeñas ciudades.

La distorsión de la tradicional música ranchera mexicana, parte del folclore, ha desvirtuado el espíritu de los corridos, que se enriquecían de los temas revolucionarios y problemas sociales, pues ahora son encauzados a describir y promocionar actitudes de violencia y criminalidad.

Así, en las estaciones del Grupo Asir en Sinaloa no se trasmite música grupera que hable de violencia, narcotráfico, drogadicción o alcoholismo, precisa Leticia Carrillo, gerente de la organización.

Juan de Dios Meyer Félix, jefe de Producción de la cadena Radio Sistema Promored, en un editorial de su noticiero Alta Voz, difundido todos los días por la mañana, precisó que desde hace muchos años dicha empresa no da cabida en su programación a la difusión de los narcocorridos, para así contribuir a un cambio de mentalidad entre quienes desean otra forma de vida en el estado.

En los nuevos corridos no sólo se reseña la suerte que corren los miembros de la mafia, sino de gente que se ve ligada a ellos en forma directa o indirecta, como fue el caso del cantautor Chalino Sánchez, oriundo de este municipio, quien tuvo una época dorada con la interpretación de corridos alusivos a los "Buchones", como se les denomina a los traficantes de drogas que comienzan a despuntar entre los grupos delictivos.

?Me recuerda aquel Chicago/ de aquellos años cuarenta/ se mataban ciudadanos con libertad y metralleta/ Ya en Culiacán, Sinaloa, a nadie se le respeta/ antes fue Norma Corona, después otros más/ hoy mataron a Chalino, ya no se le oirá cantar/ se extrañarán sus corridos con la banda Culiacán?.

Martín Núñez Mariscal, delegado de la Sociedad de Autores y Compositores, dice que la medida que asumieron los concesionarios de la radio y la televisión no perjudica a los autores de música, cuyos ingresos por regalías provienen en mayor medida de sus grabaciones.

A juicio del líder de la Sección XXXIV del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Música, Torres Obeso, es entendible la preocupación de autoridades y concesionarios por el clima de inseguridad y violencia que se vive; sin embargo, no comparte los criterios de que los narcocorridos contribuyen a ello. También dice que una eventual prohibición para ejecutar esta clase de música, puede constituir una violación al derecho de expresión y al libre ejercicio de una actividad profesional lícita.

"Jefe de Jefes" es el tema que da nombre a su disco lanzado en 1997 por los Tigres del Norte, cuya letra, según la vox populi , fue dedicada en vida al entonces jefe del cártel de Juárez, Amado Carrillo, oriundo de Culiacancito, municipio de Navolato, Sinaloa, cuya difusión en presentaciones en vivo del grupo musical ha roto récord. ?Soy el Jefe de Jefes señores/ me respetan a todos niveles/ ni nombre y fotografía/ nunca van a mirar en papeles/ porque a mí el periodista me quiere/ y si no mi amistad se la pierde? Héctor Palma Salazar El Güero Palma es otro personaje sinaloense del mundo del narcotráfico que ha sido inmortalizado en vida con un corrido: ?Sinaloa tierra hermosa de la Noria Mocorito/ hay un hombre que se burla de la ley y el destino/ de la muerte no se diga a ésa nunca le ha temido/ para hablar del güero Palma hay que quitarse el sombrero/ las leyes lo respaldan dicen que es por su dinero/ la muerte no agarra plata y también le tiene miedo a Palma.?