liliana.alcantara@eluniversal.com.mx

Una nueva droga ha llegado a México. Es un narcótico, disfrazado de sales de baño que está a la venta a través de sitios de internet en nuestro país. El enervante, creen autoridades sanitarias, se ha internado al territorio nacional por la frontera norte.

La droga se vende en polvo, en la presentación de sobre de aluminio o frasco de 200 y 500 miligramos, y tiene al menos 16 marcas distintas como Cielo de vainilla, Ola de Marfil, Bendición, Relámpago blanco, Huracán Charlie, entre otras. En el empaque se comercializa como sales de baño, pero no se trata de las verdaderas que se emplean para aromatizar el baño de tina. Ésta es sólo una estrategia comercial de los fabricantes para introducir la sustancia a los países.

Según las investigaciones de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), es un compuesto granulado que, al ser tomado, aspirado, fumado o inyectado, altera el funcionamiento de los neurotransmisores del cerebro y provoca un agudo síndrome de dependencia, además de alucinaciones, paranoia, aceleración del ritmo cardiaco, ataques de pánico, agresividad e ideas suicidas. Incluso, se le ha relacionado con actos de canibalismo.

Debido a los peligrosos efectos que provoca, 37 estados de la Unión Americana han prohibido o restringido la venta y consumo de este producto, pero sus fabricantes cambian continuamente la composición de esta droga para incluir ingredientes que no están restringidos en la ley y poder continuar con su distribución ilícita.

En México, las autoridades sanitarias y de atención a adictos han alertado sobre la comercialización y el consumo de las sales de baño en el Estado de México y Sonora. Incluso, en Sinaloa se relacionó esta droga con un caso de canibalismo registrado en septiembre pasado en un hotel de Los Mochis, pero se descartó al conocer el resultado de los análisis realizados al enfermo.

Este diario encontró, en un rastreo por internet, que la nueva droga está a la venta en México desde hace tres meses en, por lo menos tres sitios web, que tendrían su origen en Puebla, Michoacán y Quintana Roo.

En Ecatepec "estamos tomando medidas preventivas porque sabemos de dos o tres casos donde hubo un consumo experimental y aunque muchos jóvenes dicen que por experimentar no pasa nada, los casos de agresiones que se han registrado en Estados Unidos han sido por el consumo en la primera vez", señala Ruth Cueto, especialista del Centro Nueva Vida Ruiz Cortines para la atención de las adicciones del gobierno federal.

En Sonora, la directora de Salud Mental de la Secretaría de Salud estatal, Leticia Amparano Gámez, advirtió sobre la existencia de casos leves de intoxicación por sales de baño en la entidad. Éstas, dice, se han introducido al país por la zona fronteriza de Agua Prieta y Nogales.
Bajo la lupa

En Estados Unidos, país donde se presume que comenzó la venta y consumo de las sales de baño, la DEA ha analizado con atención los componentes y los efectos de esta droga ilícita.

Son estimulantes sintéticos -hechos en laboratorio-, cuyas sustancias químicas se derivan de la catinona, un estimulante del sistema nervioso central que se encuentra de forma natural en la planta catha edulis.

Las investigaciones preliminares señalan que las sales de baño como droga son elaboradas en China e India, y después son empaquetadas para su distribución en Europa del Este y de ahí, a EU.

Los efectos que produce al consumirla son similares a las anfetaminas, cocaína y otras sustancias sintéticas como el LSD, un potente alucinógeno producido de manera clandestina en laboratorios de la Unión Americana.

Ingrid Ceballos, investigadora del Departamento de Botánica de la UNAM, explica que la catha edulis es un árbol que crece en el sur de África, sobre todo, en Etiopía. Dice que los habitantes de Afganistán, Yemen y Madagascar suelen, de manera tradicional, mascar sus hojas, debido a los efectos inmediatos que produce en el organismo como euforia, excitación y aumento del estado de alerta. "Pero hay que tomar en cuenta que esta planta sólo es el origen de una sustancia que, combinada con otras drogas, suele potencializar sus síntomas, de manera que puede convertirse en una droga muy potente cuando se alteran sus componentes en laboratorio", indica la especialista.

De hecho, agrega, la distribución y venta de las semillas de este árbol ha sido prohibida en la mayor parte de Europa -Australia, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Holanda, Italia, Noruega, Nueva Zelanda y Suiza-, así como en Canadá y Estados Unidos.

La alerta

Esta nueva droga, por lo general, se aspira, se ingiere por la vía oral y se fuma, o bien, se disuelve en una solución para ser inyectada. Desde diciembre del 2010, en Estados Unidos, el Departamento de Justicia emitió una alerta al detectar que desde ese año comenzó a incrementarse el consumo de las sales de baño.

En el informe EWS 000007, elaborado con datos del Centro Nacional para la Investigación en Drogas, se señala que este producto "se comercializa como cristales de baño, alimentos para plantas e incienso a base de hierbas y numerosas marcas se comercializan en los 50 entidades de Estados Unidos o en sitios de internet".

"Dichos productos están disponibles en tiendas de autoservicio, tabaquerías, gasolineras, casas de empeño, salones de tatuaje y paradas de camiones, entre otros lugares. El envase suele incluir un descargo de responsabilidades legales, tales como ‘no destinado para consumo humano'. Las distintas marcas se venden en dosis de 50 a 500 miligramos. Los precios oscilan desde 25 a 50 dólares por paquete", indica.

Agrega que "a nivel nacional las personas que consumen dicha sustancia son desde adolescentes hasta personas de 40 años de edad, a menudo con una larga historia de abuso de drogas. Algunos consumidores indican que los efectos de esta droga son similares a los que producen el éxtasis, metanfetaminas y cocaína. Algunos usuarios la llaman con el término de cocaína falsa".

El informe sobre "Drogas de abuso" de la DEA, asegura que el consumo de las sales de baño genera efectos neurológicos como agitación, insomnio, irritabilidad, mareos, depresión, paranoia, alucionaciones, pensamientos suicidas, convulsiones y ataques de pánico, además de alteraciones en la percepción de la realidad, reducción del control sicomotor y falta de claridad mental.

Los efectos físicos son alteración del ritmo cardiaco, dolores de pecho, hemorragia nasal, sudoración, náuseas y vómitos. "En casos de sobredosis, las consecuencias son desconocidas y pueden ser peligrosas", advierte la DEA.

El Centro de Intoxicación de Estados Unidos reportó 6 mil 100 casos de crisis por sobredosis en el 2011, mientras que en el 2010, fueron 303.

Aunque las autoridades sanitarias y de justicia no lo han demostrado, los medios de comunicación locales han relacionado el consumo de esta droga con casos de canibalismo que se han registrado en el último año en Miami, Maryland y Nueva York.

En junio pasado, una televisora nacional de la Unión Americana dio a conocer el testimonio del joven Freddy Sharp, de 27 años, originario de Tennessee, quien fue detenido y hospitalizado tras una intoxicación por sales de baño. "Fue la peor experiencia de mi vida... Nunca había experimentado algo así, en realidad me asustó muchísimo porque aluciné sobre estar poseído. Todo lo que sentí fue una locura... sentí miedo y oscuridad, como si hubiera perdido el control".

Venta libre en el país

En México, desde agosto pasado, las sales de baño se ofrecen por internet. Los promocionales la ofertan como un calmante, para proporcionar un baño caliente similar "a las aguas termales griegas". Los vendedores sugieren añadir el producto en agua caliente "para sentirse energizados y eufóricos".

Advierten que el primer uso debe ser con moderación, pues una cantidad elevada "enturbia el agua". "Si se usa adecuadamente -añaden- las sales de baño concentradas pueden ayudar a alcanzar cumbres que antes se pensaban inalcanzables". Aseguran que el producto es original y legal en Estados Unidos. Esta droga la venden en presentaciones de 500 miligramos y su precio "de promoción" es de sólo 10 pesos, con un pedido mínimo de 50 sobres.

Apenas hace una semana, una empresa mexicana que distribuye drogas sintéticas por internet anexó a su "catálogo" las sales de baño de marca Cielo de Vainilla e Ivory, con un precio de 390 pesos. Según el anuncio, esta droga es "dos veces más potente que los productos similares". "Un golpe de nieve y el resto es pura energía", señala el vendedor. El producto, a decir de sus comerciantes contiene "sales epsom" (sic), bicarbonato de sodio, cloruro de sodio, minerales, oligoelementos y aminoácidos naturales.

Los anuncios señalan que este producto "no es apto para el consumo humano" y que el envío es "discreto".

La advertencia sobre la existencia de esta potente droga se hizo en México el 26 de junio pasado, durante la conmemoración del Día Internacional de la Lucha contra las Drogas. Frente al presidente Felipe Calderón, el representante regional para México, Centroamérica y el Caribe de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito, Antonio Luigi, manifestó: "Los mercados ilícitos de droga han registrado la llegada de nuevas sustancias sicoactivas. Estas sustancias, por su composición química, no están bajo control y en muchos casos se venden libremente, sobre todo por internet. Desafortunadamente comenzaron a ser fiscalizadas hasta después de la muerte de sus jóvenes consumidores, como ha sido el caso de las sales de baño".

Un mes después, agentes de la DEA decomisaron en El Paso, Texas y Nuevo México, 31 contenedores con sales de baño, que estaban dispuestas para distribuirse en la frontera Estados Unidos-México.

La directora de Salud Mental de la Secretaría de Salud de Sonora, Leticia Amparano Gámez, confirmó la presencia de esta droga en México. Asegura que los hospitales del estado se han detectado algunos casos leves de intoxicación por el consumo de esta sustancia, que, agrega, seguramente ingresó por la frontera con Estados Unidos.

En Ecatepec, los centros Nueva Vida han detectado tres casos de consumo "experimental" de sales de baño, sobre todo, en personas que han regresado de Estados Unidos.

"No consumas sales de baño porque te destruirá, destruirá a tu familia y destruirá todo", advierte Freddy Sharp, el joven ex adicto que ahora habla de su experiencia a nivel mundial para alertar a otros potenciales consumidores.