Al grito de “paz para el mundo entero; paz para México” y “mujeres solas, invisibles; mujeres unidas, invencibles”, más de mil 500 tijuanenses formaron un símbolo gigantesco de “amor y paz”, luego de participar en una carrera de tres kilómetros.

“Mujeres, mujeres, mujeres”, una agrupación que surgió a propósito de la violencia que azota esta frontera, organizó el evento en el que participaron niñas, jóvenes, adultas y personas de la tercera edad, además de funcionarias y políticas, algunas custodiadas por escoltas.

Lizbeth Sánchez, creadora del grupo y locutora de una radiodifusora, explicó que la idea surgió de la necesidad de participar en la solución de la ola violenta que azota esta frontera, “en lugar de quedarnos sentadas esperando a que la sociedad o el gobierno hagan algo para resolver el problema”.

Destacó el papel de las mujeres en la formación de las familias y sociedades y el respaldo que deben recibir para mejorar la situación de inseguridad actual que afecta a todos, por lo que anticipó que continuarán con las movilizaciones.

Ahí estuvo Sara Ruiz Meza, madre de una jovencita que fue asesinada hace tres años por individuos que no han sido castigados a pesar de que se les identificó e incluso se presentaron ante las autoridades que los dejaron en libertad.

Benazir Sara Chavolla Ruiz tenía 15 años de edad cuando fue lanzada desde un vehículo en movimiento en diciembre del 2005, murió después de varios días de agonía y desde entonces su familia inició una lucha para que se castigue a quienes la victimaron.

Fernando Emmanuel Valencia, un joven de 22 años sobrino de un magistrado de la Judicatura con jurisdicción en Tecate, fue señalado como el principal responsable y se le detuvo pero luego se le dejó en libertad.

Sara Ruiz explicó que ante ese tipo de injusticias que permiten la impunidad, las movilizaciones ciudadanas que motiven a la conciencia son la mejor alternastiva, aunque en el caso de su hija no le devolverán la vida.

Tres mil participantes, la meta

Sobre la formación del “amor y paz”, Lizbeth Sánchez explicó que se había convocado a unas 3 mil mujeres y sólo asistieron la mitad, sin embargo, confió en que el próximo año lograrán el objetivo porque cada vez habrá mayor conciencia.

Entre las participantes se encontraba Alicia Llanos, la presidenta del DIF Municipal y esposa del alcalde local, quien coincidió en calificar como fundamental la intervención de la población femenina en la formación de sociedades.

Hizo un llamado a las madres de familia a que reconozcan y asuman su papel, y a los hombres les pidió que valoren los esfuerzos femeninos y participen en el esfuerzo.

Y aunque fueron convocadas, las regidoras del Ayuntamiento local no asistieron a la actividad dominical que se llevó a cabo en las instalaciones de la Unidad Deportiva CREA y algunas calles aledañas, en cambio sí se observó a la diputada Edna Pérez, del Partido Revolucionario Institucional.

En la carrera atlética de tres kilómetros que antecedió a la formación del “peace and love” también estuvo la campeona de box Jackie Nava, quien llegó en cuarto lugar de la carrera, después de la tecatense Jessica Carrillo, ganadora del evento, y las tijuanenses Verónica García y Ana Vega.

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