El racismo contra los gitanos va en aumento en Italia, denunció hoy el ministro de Solidaridad Social, Paolo Ferrero, mientras el titular del Interior, Giuliano Amato, reconoció que sus compatriotas tienen "muchos prejuicios" hacia ese grupo.

En la "Primera Conferencia Europea sobre la Población Gitana", que inició este martes en Roma y durará dos días, Ferrero criticó la mayor intolerancia y racismo contra los gitanos.

Por ello propuso un plan con fondos especiales dedicados a esa población que, recordó durante la conferencia, también sufrió el exterminio durante el nazismo.

Según Ferrero, es necesario apuntar a la escuela, a la casa y al empleo como medios de integración de la comunidad gitana, aunque dijo que "no se puede pedir a nadie abolir la propia identidad por motivos de integración".

"Los italianos tienen demasiados prejuicios contra los gitanos", declaró a su vez Amato, quien inauguró la conferencia en la que participan expertos europeos.

La subsecretaria del Interior, Macella Lucidi, propuso por su parte reconocer a los gitanos como minoría linguística.

"La historia nos dice que los gitanos no han nunca combatido una guerra y esta es otra buena razón por la cual se merecen nuestra atención", declaró.

El experto Marco Impagliazzo, de la Universidad de Extranjeros de Perugia (centro), recordó que la más grande minoría de Europa (siete y nueve millones de gitanos), está presente en el continente desde el siglo XIV y desde entonces ha sido perseguida hasta que culminó en el genocidio bajo el nazismo.

Justamente la conferencia inicia en la víspera de la Jornada de la Memoria, cuando el mundo recuerda el Holocausto.

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