Familiares de los caídos y dirigentes del movimiento popular-estudiantil de 1960, como todos los años se reunieron en la Alameda "Granados Maldonado", donde hace 47 años, 17 civiles que luchaban por la autonomía de la actual Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), fueron masacrados por elementos del ejército mexicano, lo que precipitó la caída del gobierno del general Raúl Caballero Aburto.

El 30 de diciembre de 1960, el general Julio Guerrero, al mando de un pelotón de soldados se dirigió a la Alameda "Granados Maldonado", donde existía el campamento popular de apoyo a los estudiantes en huelga en el interior del edificio docente, donde un electricista colgaba una manta a quien un soldado le disparó y mató, lo que desencadenó un enfrentamiento con resultado de más de 17 ciudadanos muertos.

Jesús Araujo Hernández, uno de los principales dirigentes de la Federación Estudiantil Universitaria Guerrerense (FEUG), de aquel tiempo y Pablo Sandoval Cruz, representante popular aseguraron que el pueblo no le importó enfrentarse a un gobierno autoritario, dio su vida y su sangre por lograr la autonomía de la UAG, pero que a la institución universitaria le hace falta mucho para responder a ese sacrificio.

El dirigente estudiantil aseguró que a la UAG, requiere de formar profesionistas con ética para que respondan a los intereses de la sociedad, porque sostuvo que muchos de los médicos, agrónomos, abogados, arquitectos, entre otros profesionistas que se forman en la institución universitaria que costó sangre, en lugar de ayudar al pueblo, "lo agraden".

Pablo Sandoval Cruz, dijo que lo más triste es que la UAG, como producto de una lucha popular-estudiantil, actualmente es rehén de las corrientes políticas a su interior que "solo están pensando en cómo arribar al poder para hacer mal uso del subsidio universitario".

Agregó que a la distancia de 47 años, los gobiernos autoritarios no se han desterrado del poder en Guerrero, y han seguido ocurriendo las matanzas como en la "guerra sucia" de los años 70 y 80 con el ex gobernador guerrerense Rubén Figueroa Figueroa, de su hijo Rubén Figueroa Alcocer, con la matanza de "Aguas Blancas", René Juárez Cisneros, con lo de El Charco, en Ayutla, "y ahora éste que encabeza el gobernador Zeferino Torreblanca Galindo".

Araujo Hernández señaló que actualmente se hacen esfuerzos para manejar con honradez los recursos de la UAG, "pero hace falta avanzar de la crítica de que otros se robaron el dinero, y avanzar hacia su castigo para que no se paseen con toda impunidad por las calles".

grg