Con un acervo de 4 mil piezas, el ex Convento de San Pablo construido por los dominicos en 1519 y la Casa de Antelo, del siglo XVIII, ambos en la ciudad de Oaxaca, serán en la primavera del 2008 la sede del nuevo Museo Textil de Oaxaca, anunció hoy aquí su directora Ana Paula Fuentes.

En conferencia de prensa, previo a la inauguración de la exposición "Textiles de Oaxaca", en el Palacio de Cultura Banamex, en esta capital, Fuentes dio a conocer que el nuevo recinto será un espacio vivo dedicado al estudio, conservación, exhibición y difusión de los textiles en México.

El proyecto a cargo de la Fundación Alfredo Harp Helú, que prevé inaugurarse entre los meses de marzo y mayo del próximo año, es un proyecto sin fines de lucro, que nace de la inquietud y la necesidad de crear un espacio dedicado al rescate, a la conservación, exhibición y promoción del valioso patrimonio cultural que constituyen los textiles del mundo.

De acuerdo con Fuentes, el museo ha reunido una "rica y valiosa" colección de textiles antiguos mexicanos para que las tejedoras de diferentes comunidades pueden acercarse a ellos.

De igual manera, dijo que la idea es crear un museo que dé servicio a la gente que teje; "nadie mejor que los ojos de los tejedores sabrán apreciar el trabajo y la belleza que implica un textil, contemplarlo, aportará creatividad y nuevas ideas a quienes dedican su vida en la manufactura".

"Con este nuevo museo, el público podrá ser participe de un universo de diseños, texturas, técnicas y procesos creativos, tanto de piezas tradicionales como del arte contemporáneo", agregó.

De acuerdo con Fuentes, con la aparición del Museo Textil en Oaxaca, se rescata además ambos espacios, el ex convento de San Pablo y la Casa de Antelo, como parte de un proyecto dedicado a la difusión cultural en la ciudad de Oaxaca.

La muestra integrada por 60 piezas entre textiles, huipiles, enredos, quechquemilt, fajas, tapetes y lienzos entre otros, está dividida en tres núcleos temáticos: Textiles de Oaxaca, Textiles de México y Textiles del Mundo.

En el primer núcleo se presenta una muestra de la indumentaria de algunas comunidades indígenas para ilustrar la variedad de fibras, de tintes y técnicas de manufactura que se mantienen vivas en Oaxaca.

Asimismo, se desea resaltar que el textil es una forma de expresión que han compartido todos los grupos culturales del Estado de Oaxaca.

En esta parte, resalta la calidad del huipil, de San Bartolo Yautepec, que muestra el hilado de algodón más fino que se haya encontrado en un textil mexicano de los últimos 100 años.

En Textiles de México se exhibe la riqueza biológica y variedad de materiales disponibles para el arte textil, como las fibras y colorantes que ofrecen numerosas plantas y animales.

De igual manera, la compleja historia cultural de la sociedad oaxaqueña se manifiesta en un acervo extraordinariamente rico en técnicas, diseños y de prendas tejidas.

En esta sección de la muestra, se presentan tejidos y bordados que ejemplifican la vitalidad del proceso de transformación constante, es decir, de cómo se han desenvuelto a lo largo del tiempo las formas y los estilos en el textil mexicano.

Por último, en Textiles del Mundo, se aprecian grecas de algunos textiles de rafia del Africa Central, las cuales recuerdan la geometría de Mitla.

También se presentan la técnica y los diseños del rebozo del siglo XIX respecto a textiles islámicos de seda decorados mediante el teñido de reserva con amarres en la urdimbre, llamado kyat, por mencionar algunos.

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