El rompimiento con el gobierno del presidente Vicente Fox no es un enfrentamiento sino un llamado pacífico, respetuoso, a retomar el rumbo en favor de la ecología, aclaró Jorge González Torres, líder del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).

También precisó que esa ruptura es sólo con el gobierno y no con el PAN, partido con el que se ha aliado en recientes procesos electorales, como el pasado 8 de julio en los comicios de Baja California. Además, expresó su satisfacción porque en esa entidad la nueva administración panista dejaría en manos de un ecologista la dirección respectiva.

Sin embargo, a pesar de la separación con el gobierno federal anunciado por su hijo, el senador Jorge Emilio González en el recinto de San Lázaro, destacó que estaría en la mejor disposición de aceptar una invitación del presidente Fox para dialogar y tratar de resolver las diferencias "sobre bases serias y no de componendas".

En conferencia de prensa, flanqueado por legisladores de su partido y teniendo a sus espaldas la bandera nacional y el emblema del PVEM, González Torres refrendó la posición asumida por su vástago.

Sostuvo que de ninguna manera fue una posición visceral sino congruente con su lucha, y que por eso no hay arrepentimiento ni sentimiento de culpabilidad por haberle puesto punto final a la alianza.

Los compromisos ecológicos de la campaña presidencial, según él, no se han cumplido y no hay indicios de que pronto se vaya a poner en marcha un programa nacional ambiental.

Por eso se mostró complacido con el deslinde que hizo su hijo en la tribuna del Congreso de la Unión y se atrevió a compararlo con el senador chiapaneco Belisario Domínguez.

Recordó el valor que tuvo Belisario a principios de siglo pasado cuando condenó el gobierno de Victoriano Huerta y lo calificó de traidor, sin importarle que estuviera en riesgo su vida.

Convencido de que el PVEM no se equivocó al aliarse con Fox para las elecciones del 2000, González Torres también ahora está seguro de que su partido no se ha equivocado al romper con el gobierno.

En contraste con lo que pregonan sus críticos, negó que la ruptura sea la respuesta de su partido a la decisión del nuevo gobierno de no incluirlo en el gabinete presidencial.

"Nunca hemos considerado como un botín al gobierno, lo que buscamos es que México cuente con un programa nacional ambiental y hasta la fecha no se observa ninguna perspectiva en ese sentido", sostuvo.

De acuerdo con el líder ecologista, quienes lo acusan de que sólo quiere su cuota de poder, tratan de confundir y desviar la atención ante el grave deterioro ambiental que sufre el país y la indiferencia oficial.

En ese sentido, como un ejemplo del lugar que le dan las autoridades a este asunto, mencionó que el presidente Fox en su mensaje político sólo le dedicó 30 segundos a la ecología.

En la conferencia de prensa en un hotel ubicado frente a Palacio Nacional, también se distribuyó y se dio lectura a un documento en el que se insiste en que el nuevo gobierno, en los nueve meses que lleva, ha ignorado y dejado de lado los problemas añejos.

"El saldo del gobierno en materia ambiental sigue siendo negativo, ya que no se puede decir que se ha avanzado cuando diariamente anuncian los medios de comunicación el tráfico ilegal de especies, la pérdida de la biodiversidad, la deforestación por cambios de uso de suelo, la degradación de los ecosistemas forestales, la pérdida de especies endémicas y la erosión del suelo", afirma el documento.