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Cientos de policías federales y efectivos del Ejército mexicano patrullan las calles de las principales ciudades en Michoacán, como parte de las acciones que el gobierno federal desplegó para desarticular al cártel de La Familia michoacana.

Mientras, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) solicitó y obtuvo de un juez federal una orden de arraigo contra 10 policías del municipio de Arteaga, Michoacán, vinculadas con dicha organización.

Informes de la 41 y 22 Zona Militar, en Michoacán, indican que todas las denuncias anónimas hagan sobre la identidad o paradero de miembros de La Familia serán investigadas.

Voceros del Ejército en esas zonas llamaron a elevar la participación ciudadana para frenar la ola de violencia que azota a la entidad, luego de la detención de Arnoldo Rueda Medina, La Minsa, considerado uno de los jefes de primer nivel del grupo delictivo.

Con el arraigo de los 10 policías de Arteaga, Michoacán, suman ya 13 los involucrados con este grupo a quienes se les dicta esa medida cautelar; el viernes fueron arraigados Antonio Farfán Sánchez, Rafael Antonio Gómez Pérez y Francisco Javier Frías Lara, El Chivo, este último operador de la banda en Petatlán, Guerrero, y vinculado al asesinato de 12 policías federales que fueron ejecutados y sus cadáveres tirados sobre la caretera Morelia-Lázaro Cárdenas.

En el marco de las investigaciones contra La Familia, agentes federales y soldados intensificaron sus patrullajes para evitar más ataques a instalaciones federales o que otros agentes sean víctimas de atentados.

De ahí, que desde hace tres días se inició la difusión masiva de cárteles pidiendo a la población denunciar anónimamente a los integrantes del grupo criminal bajo la consigna de que todos estamos obligados a denunciar y combatir la inseguridad en Michoacán, para lo cual se pusieron a disposición de la población los números telefónicos 01 800 83 09 897 y 01 800 34 00 886 sin costo alguno.

Por lo que hace a los 10 policías arraigados, la SIEDO indicó que hasta el momento se logró establecer que colaboraban de distintas formas y se hallan presuntamente relacionados con la ejecución de 12 elementos de la Policía Federal y del Ejército en Morelia, Zitácuaro, Apatzingán, Lázaro Cárdenas, Pátzcuaro y Tafetán, como represalia tras la detención del capo Rueda Medina.