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En 2008 la guerra entre los cárteles del narcotráfico dejó un récord histórico de 5 mil 630 ejecutados en todo el país. Según el conteo de EL UNIVERSAL, en los últimos cuatro años, 12 mil 61 personas han muerto por la delincuencia organizada; 46.5% de estos homicidios ocurrieron el año pasado.

El promedio de víctimas diarias en 2008 fue de 15 y la jornada más violenta ocurrió el 3 de noviembre, cuando se reportaron 58 homicidios con el sello del narco. De esta cifra, 19 fueron de Sinaloa y 12, de Durango.

En 2005 se contabilizaron mil 537 crímenes; el siguiente año,2 mil 221, y en 2007, 2 mil 673.

Los operativos del gobierno federal no inhibieron a los delincuentes, que con granadas de fragmentación y armas de alto poder balearon edificios de las corporaciones de seguridad pública y emboscaron a policías. Además, en varias ocasiones colocaron mantas con leyendas de intimidación y denuncias contra guardias coludidos con el tráfico de estupefacientes.

Así, de las víctimas en 2008, al menos 429 eran mandos o agentes de alguna corporación.

En este contexto, el 27 de mayo, en Culiacán, Sinaloa, sicarios del cártel de Sinaloa se enfrentaron a elementos federales a quienes les lanzaron granadas que mataron a siete agentes. En septiembre, otros siete fueron emboscados y asesinados en Tancitaro, Michoacán.

Los militares también fueron blanco de ataques de las bandas; 20 fueron levantados y decapitados: 11 en Nuevo León; ocho en Guerrero y uno en Salina Cruz, Oaxaca.

En Chihuahua, 2 mil seis casos

Este año, del derramamiento de sangre sólo Tlaxcala quedó libre y Chihuahua encabeza narcocrímenes con 2 mil seis; mil 633 ocurrieron en Ciudad Juárez.

En Chihuahua, los traficantes de drogas se disputan las rutas de la cocaína hacia Estados Unidos, cuya batalla, de acuerdo con expertos, la libran los cárteles de Juárez y del Golfo.

A Chihuahua le sigue Sinaloa con 950 ejecuciones; Baja California con 689; Durango, con 273 y Guerrero, con 241.

Ejecuciones masivas

2008 también se caracterizó por las ejecuciones masivas, uno de los casos que más impactaron tuvo lugar el 12 de septiembre, cuando en las inmediaciones de La Marquesa, estado de México, fueron encontrados los cuerpos de 24 hombres ejecutados. Todos tenían el tiro de gracia, de armas calibre 38 súper, 9 milímetros y .45.

El 28 de agosto, una docena de cuerpos decapitados y con huellas de tortura fueron hallados en dos municipios de Yucatán.

Además, esta guerra entre narcos quebrantó la vida cotidiana de la sociedad civil.

El episodio que más impacto causó a nivel nacional ocurrió el 15 de septiembre en Morelia, Michoacán, cuando durante los festejos patrios fueron detonadas dos granadas de fragmentación entre la gente que se divertía en la plaza principal; la agresión dejó un saldo de ocho muertos y más de 100 heridos.