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Tras el desmantelamiento del formato del Informe de gobierno, que por años colocó al jefe del Ejecutivo en el centro del sistema político mexicano, el presidente Felipe Calderón adoptó una nueva estrategia para difundir sus acciones.

Echó mano de los principales medios electrónicos del país, transmitió spots temáticos de gobierno y ofreció al menos ocho entrevistas a noticieros de radio y televisión de alta audiencia.

Desde la noche del pasado lunes 1 de septiembre, el presidente Calderón concedió entrevistas a los dos noticieros estelares de las televisoras más grandes del país: Televisa y Tv Azteca. Por espacio de unos 10 minutos, el mandatario abordó prácticamente de manera abierta temas de gobierno y algunos coyunturales. Economía, narcotráfico, seguridad y gobierno, entre otros.

Luego de su paso por la televisión, el mandatario dedicó parte del martes a dar entrevistas a noticieros de radio con cobertura nacional.

Desde temprana hora se hicieron los preparativos en Los Pinos para que fueran los titulares de los noticieros radiofónicos quienes realizaran las entrevistas.

Calderón abrió su estrategia a las siete de la mañana con una entrevista que concedió al conductor Pedro Ferriz, que duró prácticamente media hora.

Inmediatamente después, Calderón entró al aire con Carlos Puig, en W Radio, charla que se prolongó más de 30 minutos.

La tercera entrevista matutina fue con Óscar Mario Beteta, en Radio Fórmula, y también duro cerca de media hora.

Este carrusel informativo, con el que Calderón suplió el tradicional mensaje presidencial ante el Congreso de la Unión, se intensificó por la tarde cuando el mandatario federal habló con la periodista Adriana Pérez Cañedo a las 13:00 horas.

Al término tuvo una de las charlas más largas con la conductora Denise Maerker, y al abrir un espacio para comer y para recibir a la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, siguió con otras dos entrevistas. Al atardecer, fue entrevistado por Jorge Fernández Menéndez en el espacio de radio de Grupo Imagen, y al final cerró con una entrevista que le concedió al periodista José Cárdenas, en Radio Fórmula.

El titular del Ejecutivo tocó temas que no había abordado de manera pública, como el caso del presunto conflicto de intereses en Pemex, del secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño; de los partidos políticos, del cambio al formato del Informe, pero sobre todo del tema de seguridad.

Esta estrategia de comunicación forma parte de la que se inició hace nueve días cuando Calderón comenzó una serie de mensajes en televisión abierta con motivo del segundo informe de gobierno.

“Hay una tendencia en el mundo a considerar que los foros para la rendición de cuentas debieran ser las Cámaras; sin embargo, en este caso esos foros formales de debate fueron los que hicieron la reforma para llevar a los medios de comunicación este tema de la presentación del desempeño presidencial”, opinó José Carreño Carlón, académico y ex vocero presidencial.

Sergio Ballesteros, secretario académico del Centro de Estudios en Administración Pública UNAM consideró que si se hiciera un análisis del impacto mediático de esta nueva forma de hacer públicos los avances, alcances o logros de una administración, debería de centrarse en la forma en cómo se mediatiza la política.

En tanto, Carlos Sevilla, académico de tiempo completo en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales UNAM, comentó que ahora la rendición de cuentas es un tema desconocido.