ACTEAL, Chis.— El obispo de Saltillo, Raúl Vera López, dijo que el allanamiento al Centro de Derechos Humanos diocesano Fray Juan de Larios, es parte de una campaña de hostigamiento contra la organización.

Grupos de derechos humanos y asistentes al Encuentro Nacional contra la Impunidad condenaron ayer la agresión y exigieron al Estado garantizar la integridad física del obispo de Saltillo y sus colaboradores.

En conferencia de prensa previa a su participación en la misa celebrada en memoria de las víctimas de Acteal, Vera atribuyó el ataque a la participación del centro en la defensa de varios casos de violaciones a derechos humanos, entre los que señaló el de las 13 mujeres violadas por militares en Castaños, Coahuila.

Destacó que los agresores, dos individuos encapuchados y con guantes, sorprendieron a Mariana Contreras Villarreal, integrante del equipo jurídico del centro, cuando cerraba la oficina; la golpearon y la encerraron en un baño mientras revisaban las instalaciones.

Aclaró que esta no es la primera agresión, aunque no se había llegado al daño físico. “Ha habido amenazas directas a mí, y han coincidido con resoluciones o acciones en el caso Castaños”, dijo.