MÉRIDA, Yuc.- Los hermanos del gobernador de Yucatán, Patricio Patrón Laviada, han progresado económicamente bajo el cobijo de la administración panista.

Lo mismo especulan con grandes extensiones de tierra, compran cascos de haciendas, venden autos a las alcaldías ganadas por Acción Nacional en la elección de 2004, reciben los beneficios de programas sociales para el campo o controlan los permisos de taxis y locales de mercados.

Los Patrón Laviada provienen de una familia media acomodada de la sociedad meridana, de la colonia Itzimná. Hoy se han convertido en prósperos hombres de negocios.

La clase política de oposición los señala como beneficiarios de los gobiernos estatal y municipales panistas. Algunos militantes de Acción Nacional también lo hacen, pero desde el anonimato.

"Es notorio el vínculo que existe entre los negocios de los hermanos Patrón Laviada con el gobierno, particularmente de Alejandro, que ha hecho uso de información privilegiada para hacer negocios con la tierra. Antonio hace lo suyo: vende autos a los municipios panistas", dice el perredista Eric Villanueva Mukul.

El dirigente estatal del PRI, Carlos Sobrino Sierra, considera que la corrupción de las anteriores administraciones priístas "palidece" frente a la actuación de los hermanos Patrón Laviada: "Hace 15 años Alejandro no tenía ni petate en donde caer y hoy es un hombre que tiene millones de pesos en la bolsa, en un proceso que se dio en los últimos cuatro años".

Alejandro es esposo de Pilar Cervera Hernández, hija del desaparecido ex gobernador priísta Víctor Cervera Pacheco. Es también el sobrino político predilecto del ex banquero Roberto Hernández, que está casado con una prima hermana de doña Cecilia Laviada Arrigunaga, madre de los Patrón Laviada.

Algunos testimonios recogidos en el círculo político yucateco mencionan que Alejandro entró al negocio de bienes raíces desde el sexenio de Cervera Pacheco, con dinero de Hernández. Pero la abundancia ha crecido en la administración estatal de su hermano Patricio.

Un panista de la entidad que prefiere no aparecer como fuente identificada traza el mapa de los negocios de los hermanos Alejandro, Antonio, José y Cecilia en Yucatán, geografía económica distribuida en las cinco circunscripciones electorales del estado. Una parte de esta información es del dominio público: Alejandro posee en la zona oriente, la circunscripción I, ranchos y cascos de haciendas, algunos de los cuales ha transformado en hoteles de lujo en sociedad con Roberto Hernández, y tiene áreas dedicadas a la ganadería y una zona para el cultivo del henequén, que su hermano Patricio ha dicho que "ya no es negocio en Yucatán".

Antonio ocupa la II, ubicada en la parte noreste del estado con 33 municipios, con su negocio de compraventa de autos usados a los municipios gobernados por el PAN. Las alcaldías adquirieron lotes de más de 20 unidades a la empresa Automotriz Patrón y llevan el sello con pegotes y portaplacas, el AP. Existen datos: apoyó las campañas electorales de 2004 con la operación política del actual diputado local Jimy Ambrosio Camargo.

Cecilia, encargada de las Relaciones Públicas de la alcaldía de Mérida, que abarca las circunscripciones III y IV, controla los permisos de taxis y los locales de mercados. Entregó a los líderes de comerciantes el mercado de San Benito, construido en la gestión de Ana Rosa Payán para la regulación de estos giros. Los dirigentes vendieron los locales hasta en 50 mil pesos cada uno.

José y Ricardo, en el V, al suroeste del estado, manejan una planta de cítricos en el municipio de Oxkutzcab que compra la totalidad de la producción a los campesinos de la zona. La prensa yucateca documentó en octubre de 2003 que los hermanos del gobernador figuraban entre los beneficiarios del programa Alianza para el Campo.

El gobernador ha justificado esta situación como un asunto de "transparencia", y ha dicho en distintas ocasiones, en público y el privado, que no puede negarle a sus hermanos el derecho a hacer negocios.

Lo cierto es que los hermanos Patrón Laviada y el gobernador acota el perredista Villanueva Mukul han traficado con influencias e incurrido en conflicto de intereses: "Antonio tenía su lote de autos, pero no era tan próspero. Alejandro ya estaba en el negocio de la tierra desde la época de Cervera y con la llegada de su tío Roberto Hernández le metió mucho dinero a la compra de haciendas. Las influencias van quedando claras".

"(Los Patrón Laviada) han hecho adquisiciones de tierras de una manera especulativa y lastimosa para el erario estatal, que van desde fraccionamientos donde se encuentran amigos y parientes del gobernador, principalmente en la zona norte de la ciudad", asegura el priísta Sobrino Sierra.

Los panistas ligados a los hermanos Patrón Laviada rechazan las versiones sobre tráfico de influencias, sin negar que los integrantes de la familia del gobernador han hecho negocios en este sexenio.

El diputado local del PAN Jimy Ambrosio, señalado como socio de Antonio en la venta de autos a municipios panistas, dice que los Patrón Laviada tenían recursos económicos desde hace tiempo, y que es falsa la versión de que hubo presión para que alcaldes compraran unidades a Autos Patrón.

"Puedo decir, de pláticas que he tenido con él, que Antonio ha dicho: `Yo le vendo a alcaldes del PAN y le vendo también a alcaldes del PRI. Le vendo a quien me quiera comprar`. Es entendible, es un negocio de vender coches", argumenta.

Rosa Ceballos Madera, dirigente del PAN en Mérida y una de las militantes más cercanas a la familia del gobernador, expresa que todas las acusaciones contra la familia del gobernador son absolutos borregazos : "La oposición hizo oídos sordos de muchas cosas que se denunciaban. Nosotros decimos que si hay pruebas, que se investiguen. Nosotros no solapamos nada, pero sí apoyamos y estamos como partido tanto a nuestro gobierno estatal y municipal de que hasta hoy hemos visto un trabajo responsable, que cuida las formas. El gobierno estatal tiene el aval del partido", reta.

Su compañera de partido, la diputada local Silvia López Escoffié, no rechaza en principio los señalamientos a la familia del gobernador, porque AN siempre ha luchado en contra de las complicidades y los grupos de interés. "Creo que en el caso de todos estos dichos, sí tendría que entrarse a hacer una investigación seria para dilucidar toda mala imagen o en su caso comprobar las irregularidades que se dicen. El PAN a nivel nacional debe ser congruente y sancionar, si es el caso. Se debe tomar una decisión que deje tranquilos a los ciudadanos: de que todo es mentira o tomar la separación de aquel militante; el gobernador es un militante más, que salga de la línea del bien común y no del bien particular", expone.

La oficina de prensa del gobernador respondió que estaba fuera del país cuando se solicitó una entrevista para tratar el tema. Él ha dicho que no ha buscado favorecer a su hermanos ni el poder económico ni político como una de sus metas en la vida. "Cuando trabajas, las cosas se dan solas", asegura.