Un político frente al polígrafo
Video. Una grabación de más de 2 horas, en poder de EL UNIVERSAL, muestra la prueba que se le realizó a Mario Anguiano, antes de que llegara a la gubernatura del estado
Durante más de dos horas Mario Anguiano respondió a preguntas diversas relacionadas con su vida personal y sus conflictos políticos. (Foto: ESPECIAL )
jorge.ramos@eluniversal.com.mx
Antes de llegar a la gubernatura de Colima, Mario Anguiano Moreno reprobó un examen de polígrafo cuando se le preguntó sobre vinculaciones con el narcotráfico. Un video de dos horas y 28 minutos, en poder de EL UNIVERSAL, muestra el momento en el que el actual mandatario estatal es sometido a la prueba y, al alertarle que resulta negativo, él mismo responde que no pediría que se alterara el resultado.
Anguiano se ha visto sometido a señalamientos por presuntos nexos con el narcotráfico. Se le buscó a través de cercanos colaboradores para una entrevista, pero no hubo respuesta.
Rogelio Rueda, quien fue su secretario de Gobierno hasta hace unos días, relata que desde hace seis años se le hacen acusaciones a Mario Anguiano. “Él lo ha compartido públicamente, no es tema de esconderse, es que en su familia, su hermano tuvo un problema de adicciones y esos problemas le llevaron a cometer ilícitos que le hicieron ir a la cárcel. No se trata de otra cosa sino de un problema que muchas familias de México y de Colima han tenido. Ese es el único asunto que se le ha señalado”, describe.
En el comienzo, Anguiano dice saber cuáles son las condiciones para la prueba. Durante más de dos horas Mauricio “N” le hace preguntas diversas relacionadas con su vida personal y sus conflictos políticos.
Relata, por ejemplo, que él no pertenece al grupo político de Fernando Moreno Peña, ex rector de la Universidad de Colima y ex gobernador. Sin embargo, señala que Moreno Peña ha extendido su poder más allá de su sexenio que concluyó en 2003. En ese año incluso el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación anuló la elección tras acusar a Fernando Moreno de intervenir en el proceso.
“Moreno Peña ha roto con reglas no escritas, por ejemplo, que el gobernador que termina se retira y él siguió ejerciendo el poder”, relata Mario Anguiano en el video.
—¿Influye? —pide precisar su interlocutor.
—Totalmente, él tiene un grupo y yo pertenezco al de Jesús Orozco (quien renunció al PRI y hoy es del PRD).
Revela que a Fernando Moreno Peña “no le interesaba que yo llegue (lo dijo antes de la elección) a la gubernatura porque no va a tener libertad o no va a tener el manejo que a él le interesa tener”.
Además de señalar a Moreno Peña como el personaje que instigó las historias de vínculos con el narco con personas cercanas a él, Anguiano Moreno arremete al señalar que es parte del saber popular en Colima que “Fernando se ha enriquecido de manera brutal, está considerado de los hombres más ricos”.
En 2008, describe Mario Anguiano, se sintió objeto de ataques por parte de Fernando Moreno por lo que se vio obligado a responder en una entrevista radiofónica que con el ex gobernador perdieron espacios en alcaldías y en el Congreso local, además de que se fueron del partido priístas relevantes como el propio Orozco y Socorro Díaz.
Al principio del video se aprecia cuando Mario Anguiano dice que no ha tenido vínculos directos ni indirectos con personajes vinculados al narcotráfico.
Pero cuando le repiten las preguntas con los aparatos termina aceptando que Octavio García, su oficial mayor cuando Anguiano fue alcalde de Colima, trabajó en el rancho Ángeles del Infierno, como administrador de 1999 a 2003 y que Germán Torres Anguiano, presunto narcotraficante quien apareció ejecutado en Guadalajara el 5 de junio 2006, financiaba o formaba parte de esa empresa de manera indirecta.
El 25 de febrero de 2005 el entonces gobernador de Colima, Gustavo Alberto Vázquez Montes, muere en un avionazo cuando viajaba con otras seis personas de Toluca a Colima. Lo releva Silverio Cavazos, quien murió asesinado a balazos tras dejar la gubernatura.
Hora y media de preguntas
En el video se ve cuando un hombre, de nombre Mauricio, luego de casi hora y media de preguntas sin los aparatos, ahora le pregunta a Mario Anguiano si ha recibido apoyo de alguien vinculado al narcotráfico y aunque la respuesta es negativa, después se le dan los resultados que son adversos.
—¿Has recibido apoyo de personas que se dediquen al narcotráfico?
—No, —dice el hoy gobernador con el equipo dispuesto en el torso y el brazo izquierdo.
El interrogatorio continúa.
—¿Antes del 2003 has hecho algo que de saberlo cualquiera de tus seres queridos podrían avergonzarse de ti?
—No.
Una voz fuera de cuadro sigue con las preguntas en un tono plano.
—¿Antes del 2003 has lastimado a alguien física o emocionalmente a cualquiera de tus seres queridos?
—No.
En una parte del video, la voz le dice al ahora gobernador que deben hablar de lo que está sucediendo con la prueba.
“Le voy a mostrar, pero es una gráfica muy fea, esto no es nada bueno. Y esto, mucho más malo”, recalca quien hace la prueba. Mario Anguiano, con el brazo y el torso envueltos por el equipo de medición, se inclina a ver los datos.
—Mauricio, el hecho de que estén con insistencia tratando de querer vincular (con el narcotráfico), ¿puede generar un efecto psicológico?, —inquiere el entonces aspirante a la gubernatura de Colima.
—Sí, —le responde Mauricio al hoy mandatario estatal.
—Porque cuando viene la pregunta, prácticamente la mente vincula a lo que han estado sacando, más que alguna actividad nuestra —replica Anguiano.
Mario Anguiano Moreno insiste en que la mente en automático se vincula a los dichos en contra de su persona, en el periódico (no dice cuál) y en la revista Proceso.
“Esa respuesta no depende de mí”, le explica Mauricio. Le advierte: “En la experiencia que yo tengo es que si hago un tercer gráfico, va a ser más exacerbada la respuesta”.
“Yo tendría qué hacer cosas, te explico qué es un polígrafo… pero, hay algo que se llama psicológico, cuando está dirigido tu principal foco de angustia”, insiste Mauricio.
—¿Realmente no hubo algo, que digas ‘ay, hubo alguien que puso en mi candidatura, fue un proveedor ahí ligero’, no sé. Algo que no se haya hablado? —recalca Mauricio.
—Tal vez lo que puede estar influyendo es Octavio García, el oficial mayor (cuando fue alcalde de Colima), formó parte de (Ángeles del Infierno) y él estuvo administrando de 1999 a 2003 y entiendo que Germán Torres (Anguiano, presunto narcotraficante quien apareció ejecutado en Guadalajara el 5 de junio 2006) financiaba o formaba parte de esa empresa de manera indirecta, —responde Mario Anguiano Moreno.
—¿Tú hablaste con el oficial mayor?
—Totalmente…
—¿Y él qué te dijo?
—No, él comenta, de esa parte de hecho, no platicamos, Mauricio. Son los comentarios que…
—Yo te pregunto, ¿tú hablaste con tu oficial mayor?
—Él (Octavio García) deja de ser parte de la sociedad en junio de 2003 y se integra con nosotros en octubre de 2006, cuando Germán Torres ya había perecido.
—Pero uno va arrastrando la historia de sus colaboradores, ¿me estoy explicando? La pregunta es ¿si ya lo sabías y aun con conocimiento de causa de que pudiera ser (lo invitas) y por qué (inaudible)?
—Sí, —responde el hoy gobernador.
Mario Anguiano sigue en el interrogatorio. Añade: “Ese antecedente de Octavio sí está influyendo, el que haya formado parte de esa empresa, el que haya tenido contacto con Germán, si me preguntas que si yo he tenido contacto con Germán, yo te digo que no”.
Mauricio ofrece: “Creo que lo conveniente sería lo siguiente, y ya lo digo fuera, lo que yo veo esos gráficos —agrega la voz, mientras Anguiano asiente con la cabeza— no creo, con los resultados que tenemos aquí que generar otro gráfico pueda salvarte...
De plano, Mauricio le suelta: “Si quieres ve buscando otra empresa, no hay problema”.
El hoy gobernador añade a la historia: “La realidad, tienes toda la razón, lo de Octavio, su paso por (el rancho) Ángeles del Infierno, sí traía información que estaba vinculado con Germán, no una cooptación para conmigo, pero… es una información que conozco… es ayudarle a una persona que uno aprecia, él ya se había separado de esa relación, de ese cargo de esa empresa, como ayudarle a la gente”
—Tengo los resultados y los sostengo con vehemencia, que este es el protocolo (inaudible), —recalca Mauricio.
—Yo tampoco te pediría que alteremos, —replica Anguiano Moreno.
—Me vas a tener que dar unos comentarios, a mí me evalúan cada año para ver si tengo la (inaudible) para seguir haciendo polígrafo.
—¿Qué manejo le podemos dar con…?, —inquiere Mario Anguiano.
—Este, yo creo que aquí tenemos que terminarla, cerramos, me regalas unos comentarios… y si quieres someterte a otro, insisto, con nuestra propia empresa, — señala el experto que aplicó el polígrafo.
Sin necesidad de aparato
En entrevista con EL UNIVERSAL, Rogelio Rueda señala que él sí se practicó pruebas de confianza, pero las superó.
—¿Usted y el gobernador Anguiano Moreno ose han hecho pruebas de polígrafo? —se le pregunta a Rueda.
—Yo me hice pruebas de polígrafo antes de entrar en funciones como secretario general de Gobierno, hace dos años y ocho meses. Salí bien y me nombraron secretario general de Gobierno. El gobernador (Anguiano) no hay necesidad de que se haga ninguna prueba, él fue electo y para ese cargo no se requiere esa prueba. No hay ningún elemento que tenga yo a ese respecto, responde Rogelio Rueda.
El historial de Mario Anguiano ha estado salpicado de historias que lo vinculan con el crimen organizado. De todas ha salido airoso.
El 21 de noviembre de 2010 el ex gobernador de Colima, Silverio Cavazos, fue asesinado a balazos. Con él estaba Rafael Gutiérrez Villalobos, secretario de Fomento Económico en el gobierno de Anguiano. Gutiérrez, quien fue recolector de recursos para la campaña del mandatario asesinado, resultó ileso.
Rafael Gutiérrez fue nombrado en el mismo puesto en la administración de Anguiano. Hoy es el secretario general del mismo gobierno.
En noviembre de 2014, las autoridades de Colima presentaron resultados de la investigación sobre el crimen de Cavazos. Los autores materiales e intelectuales del homicidio aún no han sido detenidos, aunque capturaron a algunos de los participantes.
Moreno Peña, el vínculo
Jorge Luis Preciado, senador del PAN con licencia y candidato a gobernador de Colima, acusa que Fernando Moreno Peña, ex gobernador priísta de la entidad, es el vínculo con el narcotráfico y pide recordar que fue él quien coordinó las campañas del PRI en Michoacán cuando Fausto Vallejo ganó la gubernatura y hoy hasta su hijo es acusado por sus nexos con Servando Gómez La Tuta, líder del narcotráfico en esa entidad y hoy preso.
“Lo que dice Jorge Luis Preciado son dichos, palabras que se le salen fácilmente sin ningún sustento. Lo que dice de Fernando Moreno Peña, para empezar él no tiene ninguna participación en las campañas del Partido Revolucionario Institucional en Colima y no porque se le rechace, sino simplemente porque tiene otras funciones encomendadas por el PRI nacional en otros estados de la república”, responde Rogelio Rueda, ex senador de la república.
En una conferencia ofrecida el lunes 14 de noviembre de 2011, Mario Anguiano rechazó que proteja a algún cártel y se dijo en aquel momento dispuesto a que lo investigara la PGR.
En Colima opera desde hace años Gerardo Mendoza, quien al parecer pelea el territorio al Cártel de Jalisco Nueva Generación, encabezado por El Mencho. También, según la narrativa del narcotráfico, enfrenta las incursiones de Los Caballeros Templarios. A él lo responsabilizan de la muerte de Cavazos y sigue libre.