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Zapopan, Jal.— A las cuatro de la mañana sonó el teléfono celular del presidente Enrique Peña Nieto. Del otro lado estaba el secretario de Gobernación. “Ahora qué pasó”, se dijo a sí mismo el mandatario. “'La Tuta' ha sido detenido”, le informó Miguel Ángel Osorio.

El jefe del Ejecutivo había tenido una larga jornada. Se entrevistó con empresarios y había dado varias entrevistas a periodistas de Jalisco. Estaba durmiendo cuando el líder de Los Caballeros Templarios fue detenido.

Eran las 12:10 horas cuando el Presidente se mostró en público. Entró al auditorio Benito Juárez, que aloja a 10 mil personas. Brincó vallas, trepó barandales y subió entre las butacas a saludar a la gente.

Se veía feliz. Tardó casi 50 minutos en darle la vuelta al coso lleno por beneficiarios de la Cruzada Nacional contra el Hambre. En ese momento, Peña Nieto consideraba que la aprehensión de Servando Gómez en Morelia es una “buena noticia”, pues se trata de un personaje que había generado zozobra en Michoacán.

Diría entonces que estamos avanzando, que se está respondiendo, que se están teniendo importantes aprehensiones de los objetivos más importantes, de los delincuentes más buscados, de los de mayor peligrosidad que han sido arrestados y hoy enfrentan procesos. “Pero sobre todo, seguimos trabajando para lograr el México de paz que queremos para todo México”, dijo.

Al narrar cómo fue informado de la detención del líder histórico del cártel de Los Caballeros Templarios hizo un amplio reconocimiento a las Fuerzas Armadas, a la Procuraduría General de la República (PGR), a la Policía Federal y al Centro de Investigación y Seguridad Nacional.

“Son instituciones del Estado mexicano que trabajan en estrecha y amplia coordinación y cuyos esfuerzos han permitido la detención de delincuentes de alta peligrosidad; por eso, desde aquí mi testimonio de reconocimiento en nombre de la sociedad mexicana por haber detenido a un delincuente tan buscado y que había generado un ambiente de zozobra y de enorme delincuencia en el estado de Michoacán y en esa región, gracias por la aprehensión de 'La Tuta'”, dijo el mandatario.

Agregó ante 11 mil personas: “La verdad, cuando vi en mi teléfono celular la llamada del secretario de Gobernación, evidentemente me pregunté: ¿Y ahora qué pasó? ¿Qué pasó a esta hora que el secretario de Gobernación me llama? Y fue para darme una buena noticia.

“Yo le dije que si a esa hora tenía que despertarme, por el motivo que me hablaba podía hacerlo las veces que quisiera, que era para darme una buena noticia (...) A esa hora o minutos antes, habían detenido en el estado de Michoacán a uno de los delincuentes más buscados, a Servando Gómez, mejor conocido como 'La Tuta', que venía siendo buscado desde hacía ya tiempo”.

Sostuvo entonces que la población reconoce y aprecia a las fuerza de seguridad. “Y en ello queda constancia del permanente compromiso que hay del gobierno de la República y de sus instituciones, especialmente encargadas de la seguridad pública por seguir trabajando para lograr el México en paz y de seguridad que queremos para toda la sociedad mexicana”.

La noche anterior, en Casa Jalisco, residencia oficial del gobernador del estado, el Presidente se reunió con empresarios, entre ellos Juan Alonso Niño y Eduardo Orendáin. Al cumplir con esta agenda se fue a descansar.

“Cerca de las cuatro de la mañana me habló el secretario de Gobernación. Y la verdad, cuando vi en mi teléfono celular la llamada, evidentemente me pregunté: ¿Y ahora qué pasó? ¿Qué paso a esta hora que el secretario de Gobernación me llama. Y fue para darme una buena noticia”. 'La Tuta' había caído.