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Juan Manuel Portal asegura que es un “crimen” que se desvíen recursos en materia social y la Auditoría Superior de la Federación está buscando cada vez más evitar este fenómeno con mayores controles debido a que siempre se presenta en las comunidades más alejadas y con un nivel importante de pobreza.

Reconoció que es más fácil desviar recursos en el ámbito social —alimentación, salud, educación y vivienda— por lo disperso del gasto y las distintas partidas que existen a nivel federal y estatal.

“Es más fácil que se pueda desviar recursos por esa discreción, pero básicamente ante una falta de claridad en los lineamientos de cómo ejercerlo se pueden dar desviaciones en el camino, igual que ocurre en los subsidios a los intermediarios”, comentó el auditor superior.

El jueves pasado, EL UNIVERSAL publicó que la Auditoría Superior encontró inconsistencias o posibles irregularidades por 56 mil millones de pesos tan sólo en el gasto social, de los cuales se han recuperado cinco mil 900 millones.

En el documento se detectó que el mayor monto de recursos por reintegrar del gobierno federal se centra en el gasto social, sobre todo en salud (cinco mil 800 millones de pesos), y en dependencias como el IMSS, ISSSTE e Inmujeres (cuatro mil millones), además de Desarrollo Social (mil 800 millones), entre otras.

El funcionario federal agregó que hace falta un seguimiento, una evaluación, metodología, visión y registro, así como una información periódica porque los municipios y los estados no entregan oportunamente la información.