suzzete.alcantara@eluniversal.com.mx

El ex presidente Felipe Calderón y su ex colaborador Juan Molinar arreciaron el debate epistolar.

Después de que el ex director del IMSS criticó a Calderón por ser un hombre de “malas formas” y lo calificó de temperamental, el ex mandatario aseguró que es mentira todos lo señalamientos del también ex secretariod e Comunicaciones y Transportes.

Felipe Calderón Hinojosa dijo que si bien señaló en su momento que el PAN era como su casa, no era con la intención de adueñarse.

Agregó que de no ser por las expresiones afectuosas de militantes y votantes, ya no estaría en el panismo.

“Mientes pues, qué pena. Sólo una cosa explica que hayas pasado de la honestidad intelectual a la franca invención literaria: la amargura. No la tenías cuando te propuse, sin margen de negociación, como consejero del IFE junto al querido Alonso Lujambio y a Pepe Woldenberg como consejero presidente”, asentó el ex presidente.

Mediante una carta pública, resaltó que el actual y verdadero problema del PAN es cerrarle la puerta a los ciudadanos, de ahí que haya muchas cosas que desmentir, sobre todo cuando la actual dirigencia del partido trabaja para sí mismo y externa calificativos que “ni remotamente han sido capaces de decírselos al gobierno (federal)”.

Calderón dijo que posiblemente esté equivocado, pero del postulado para “que nunca falten los motivos espirituales” al “ánimo Montana” —en referencia a la fiesta con bailarinas del ex coordinador de diputados del PAN Luis Alberto Villarreal— hay una cierta diferencia.

Dijo que la lista de quienes serán los candidatos plurinominales, llamados por él “notables”, que irán a la Cámara, demuestra que las puertas del PAN están cerradas a ciudadanos y a servidores públicos leales e intachables.

En cuatro cuartillas, suscribió, sin mencionar al presidente del PAN Gustavo Madero, que quienes que están en esa coalición de intereses han sido capaces de inflar el padrón e impiden el ingreso de quienes no responden a sus intereses, “ni el PRI se había atrevido a tanto”, refirió Calderón.

Molinar replicó que bajo ninguna circunstancia “miente”, y mucho menos es un “amargado”. Aclaró que sus diferencias son por decisiones partidistas y no a raíz de su gestión como Presidente. Le pidió sumar y no dividir: “Nuestras diferencias crecieron cuando públicamente has dicho que estás considerando formar un nuevo partido si el PAN no se reforma. Lo habías dicho en reuniones de partido”.