El coordinador parlamentario del PRI en San Lázaro, Manlio Fabio Beltrones, señaló que la nueva Ley de Aguas no privatizará al vital líquido, aunque se proponga inversión privada; en contraparte su homólogo, el perredista Alonso Raya apuntó que de ser aprobada la reforma será un robo ‘desvergonzado' en agravio de la Nación y de los mexicanos, dado que se entregará el agua a particulares.

El diputado priísta aseguró que para hacer valido el acceso al agua como un derecho humano, es necesario un marco reglamentario que lo haga efectivo,  mediante una política hídrica sustentable, racional e integral que asegure este rubro de la seguridad nacional.

En un comunicado, Fabio Beltrones expresó que será el próximo martes cuando el pleno de la Cámara de Diputados, apruebe la nueva Ley General de Aguas, la cual busca una gestión responsable del agua a través de la suma de capital privado a las inversiones públicas, mediante la actualización del régimen de concesiones, permisos, tarifas y sanciones.

Además de consolidar la rectoría del Estado sobre las aguas nacionales mediante instrumentos de planeación, como la Estrategia Nacional de Agua, el Sistema Nacional de Información del Agua, la Red Nacional de Medición de la Calidad del Agua y los Consejos de Cuenca, añadió.

"No sólo es un tema asociado con la sustentabilidad del desarrollo, la justicia social y con la calidad de vida. El agua también es un asunto de seguridad nacional y uno de los temas cruciales para afianzar el futuro. No debemos soslayar la compleja situación hídrica del país, la disminución de la disponibilidad de agua en algunas regiones, el estado crítico de la infraestructura hidráulica y la necesidad de prevenir y mitigar los efectos de las sequías y de otros fenómenos hidrometeorológicos", aseveró.

Contrario a ello, el perredista Alonso Raya aseguró que la propuesta de reformas a la Ley General de Aguas impulsada por el PRI, PAN y PVEM, "es un robo desvergonzado en agravio de la Nación y de los mexicanos", dado que sin más deja en manos de particulares la explotación, uso, disposición y aprovechamiento de los recursos hídricos del país y nulifica, en los hechos, el derecho humano al agua.

 "La Ley General de Aguas que pretende imponer el Ejecutivo es una transgresión a la misma Constitución, pues nulifica el derecho humano al agua para permitir su acaparamiento por agentes privados, para quienes además se fortalece la posibilidad de traficar con los títulos de concesión incluso en zonas de baja disponibilidad del recurso", denunció.

El líder de la bancada del sol azteca, advirtió que la prórroga de concesiones a los particulares hasta por 60 años con opción a tenerlas nuevamente cuantas veces quieran, prácticamente les regala los recursos hídricos para acapararlos, comercializarlos y especular con su precio indefinidamente.