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El PRI emitió su convocatoria para elegir a 127 candidatos a diputados federales por el principio de mayoría relativa, es decir mediante el voto del ciudadano, a través de los delegados de cada estado, proceso en el que contempla aplicar ‘antidoping’ a los aspirantes.

En un mensaje a los medios, el presidente nacional del PRI, César Camacho Quiroz, detalló que el proceso para las 117 restantes candidaturas comenzará hasta enero próximo, y serán designados por la Comisión de Postulación de candidatos.

“El PRI acude puntual a esta cita con la democracia. Esta mañana convocamos, llamamos a los priístas, y a quienes comparten sus principios, sus valores y están de acuerdo con su programa de acción, y que tengan interés en ser considerados para convertirse en las y los abanderados de las causas sociales que el partido está recogiendo, y de esa manera ser los portaestandartes de la causa que impulsamos en los comicios del 7 de junio próximo”, dijo.

Camacho Quiroz señaló que es importante señalar que de los 300 distritos federales electorales en la coalición firmada con el Partido Verde Ecologista, 56 le corresponderán al PVEM; los 244 restantes los eligirá el PRI.

“De estos 244, 127 serán designados por el proceso de convención de delegados, y los 117 restantes se definirán bajo el procedimiento de postulación de candidatos; mecanismo que fue aprobado por el Consejo Político Nacional y avalado por el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE)”, explicó el dirigente priísta.

Lo anterior con la intención, dijo el presidente nacional del PRI, de garantizar la paridad de género de candidatos en el mismo número, y en condiciones igualmente competitivas.

Controles tricolor. En cuanto a las pruebas de ‘antidoping’, la convocatoria destaca como requisitos para los aspirantes la firma de un documento mediante el cual autorice al partido llevar a cabo una investigación sobre su situación patrimonial o fiscal, entorno social, actuación como servidor público, así como respecto de responsabilidades penales o administrativas.

Además de someterse a evaluaciones y pruebas para diagnosticar si los aspirantes son adictos al consumo de estupefacientes; corroborar no haber realizado actos antijurídicos relacionados con el uso de recursos de procedencia ilícita y no tener vínculos con la delincuencia organizada.

El presidente nacional del PRI indicó que el PRI con esta convocatoria rechaza la política de la fuerza porque cree que en “la fuerza de la política”, de ahí que sea una responsabilidad democrática hacer que los comicios se llevan a cabo en paz y con una copiosa participación ciudadana, “es nuestra convicción y deber”.

Sus campañas no serán para denostar y serán de contenido ciudadano, propositivas, de ahí que no se prestarán al juego “perverso” de descalificaciones, dado que sus propuestas buscan robustecer las instituciones, pues esa es la vocación del PRI, afirmó.