En México, la patente del Viagra caducó en noviembre de 2012. Desde entonces han aparecido en el mercado 28 versiones genéricas de este medicamento para la disfunción eréctil. La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) estima que a partir de su liberación, el costo del citrato de sildenafilo se ha reducido hasta en 70%. A su vez, el Prozac, patente de Eli Lilly, un medicamento recetado contra la depresión, mantuvo un monopolio de fabricación hasta diciembre de 2003 consiguiendo 4 mil millones de dólares en ventas; a partir de su liberación existen 44 versiones genéricas de fluoxetina en el mercado mexicano.