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Las secretarías de Educación Pública (SEP) y de Hacienda y Crédito Público anunciaron que a partir de enero de 2015 operará el Sistema de Dispersión de Pagos Electrónicos para 950 mil maestros, de un total de un millón 847 mil 430 personas, que laboran en las escuelas de educación básica, sin embargo hasta entonces iniciará la “depuración” del padrón de la nómina única para descartar aviadores, comisionados o personal que labora en dependencias ajenas a la educación.

La transferencia de la nómina magisterial de los estados a SEP significa un incremento del gasto educativo de 37 mil millones de pesos para 2015, debido a que se reconocieron prestaciones federales y las que los gobernadores le entregaron a las secciones del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en 22 años.

“Les estamos reconociendo a todos los trabajadores federalizados tanto las prestaciones federales como las estatales, que a lo largo de los últimos años se les fueron incrementando en cada una de las entidades educativas”, explicó el subsecretario de Egresos de Hacienda, Fernando Galindo Favela.

Con ello se garantiza que los trabajadores y maestros recibirán “100% del sueldo que venían recibiendo”. El funcionario dijo que “a partir de la implementación del pago de la nómina —en enero del próximo año—, vamos a empezar una depuración del Padrón que conciliamos con las entidades”.

Informó que en el caso de los maestros que pertenecen a los sistemas estatales el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y gasto operativo (FONE) enviará a las entidades los recursos para cubrir el pago de servicios a los trabajadores transferidos desde 1992.

La figura que se utilizarán será la de “plazas subsidiadas”, al tiempo que hará uso de un Fondo de Compensación que será una “garantía para que los estados no reciban menores recursos a los que venían recibiendo a través del Fondo de Aportaciones para la Educación Básica (FAEB)”, y lo recibirán aquellas entidades que en la “conciliación de plazas quedaron por debajo del techo” financiero de ese Fondo.

Este nuevo sistema, impulsado a través de la reforma educativa, tiene como propósito “vigilar la transparencia y la rendición de cuentas sobre el origen y el destino de los recursos que se destinan en materia educativa”, dijo el funcionario federal.

El Sistema de Dispersión de Pagos Electrónicos es el nuevo mecanismo de distribución presupuestal de una proporción —mayor al 90%— de los 330 mil 325.8 millones de pesos que se asignaron al FONE en el presupuesto 2015, aprobado en la Cámara de Diputados, para la operación de escuelas, el pago de nómina y la cobertura de prestaciones de los maestros y trabajadores de las escuelas de preescolar, primaria y secundaria.

Para la Secretaría de Hacienda la erogación garantiza los pagos por retiro, fondo de vivienda y seguros que les otorga el ISSSTE.

De acuerdo con el subsecretario Galindo Favela este Fondo reporta un crecimiento real de 9.2% respecto a lo que se ejerció el año pasado, de manera que “ninguna entidad federativa va a recibir menos recursos de lo que se presupuestó el año pasado”.

Durante la realización del Censo de Escuelas, Maestros y Alumnos, que realizó la SEP en conjunción con el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) en el año 2013, se reveló que del total de trabajadores censados 39 mil 222 eran aviadores, 30 mil 695 tienen un cargo como comisionados, 113 mil 259 docentes laboran en otro centro de trabajo.

Al preguntarle al Oficial Mayor de la SEP, Marco Antonio Abaid Kado, sobre esa proporción de trabajadores dijo que se van a pagar a todas aquellas plazas reconocidas a partir de la conciliación, de las que fueron transferidas a los estados, “estaremos cumpliendo con pagar eso, dependiendo de lo que ellos nos manden, validado en sus nóminas”.