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A casi dos décadas de la creación del llamado Examen Único para el ingreso a las escuelas de bachillerato de UNAM, IPN, Conalep y Colegio de Bachilleres, entre otras cinco instituciones, la Secretaría de Educación Pública (SEP) reconoció que el mecanismo de asignación de lugares provoca el abandono o deserción por parte de los jóvenes que son enviados a planteles que no deseaban.

Rodolfo Tuirán, subsecretario de Educación Media Superior, dijo que la SEP solicitará el análisis del mecanismo de asignación de alumnos en la Comisión Metropolitana de Instituciones Públicas de Educación Media Superior (Comipems), sólo que la directora del Colegio de Bachilleres, Sylvia Ortega, dio a conocer que se integró un grupo de expertos para hacer una serie de propuestas que cambien el mecanismo de asignación para el próximo año.

Al encabezar el foro del Movimiento Contra el Abandono Escolar, el subsecretario dijo que la Secretaría se fijó como meta sexenal reducir en 40% el abandono escolar de los jóvenes de bachillerato.

Con ello prevé que para el año 2018 los esfuerzos institucionales no podrán evitar que 465 mil 924 estudiantes dejen la escuela.

Indicó que los alumnos que sufren violencia están en riesgo de abandonar el centro educativo.

Por su parte, la directora general del Colegio de Bachilleres, Sylvia Ortega Salazar, aseguró que en el actual esquema de asignación de lugares hay limitaciones de georreferencia, esto es, de alumnos que viven alejados de las escuelas asignadas.

Además de que los jóvenes más desfavorecidos son los últimos a quienes se les asigna escuela y como consecuencia son los primeros en desertar.

Por ello es que se solicitó el estudio y “se están terminando los análisis. Hay un trabajo de expertos ahora, que no es fácil, porque el mecanismo es bueno. Eso va a derivar en una propuesta para eventualmente presentar al consejo del Comipems”.