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El 98% de los menores ilegales provenientes de Centroamérica no fueron deportados en 2013 por el gobierno de Estados Unidos, lo que provocó el arribo de más niños no acompañados a territorio estadounidense, indica un reporte del Departamento de Seguridad Interna (DHS, por sus siglas en inglés).

Al respecto, el documento precisa que en el año fiscal de 2013, del total de niños sin compañía no mexicanos, el 97.9% fueron entregados en custodia a algún familiar, padre o hermano; mientras que en 2012 fueron 62% y en 2011, 57%.

Del total de menores que no fueron deportados, el informe detalla que 31.1% fue entregado a sus madres; 17.2% a sus padres; 14% a algún hermano adulto; 8.1% a algún tío; 5.9% a una tía; 1.1 % a un abuelo y el resto corresponde a los menores recibidos en ese país por algún familiar lejano o asociado.

“Previamente al año fiscal 2013 poco menos de 2% (aproximadamente mil 700 niños sin compañía no mexicanos) fueron repatriados a sus países de origen por la Oficina de Restablecimiento de Refugiados (ORR)”, refiere el documento

Sin embargo, destaca que “en 2013 esta proporción se redujo a solamente 0.1% de niños sin compañía no mexicanos”; así mismo se descubrió que otros huyeron o en realidad eran mayores de 18 años y arribaron con compañía a territorio estadounidense.

Reconocen fallas en medidas

El reporte elaborado por la Unidad de Viajes Ilícitos de la División de Análisis del Departamento de Seguridad Interna —fechado el 3 de junio pasado—, señala que el principal factor por el que se incrementó en Estados Unidos el arribo de menores centroamericanos sin compañía, es la no deportación inmediata a sus países de origen.

“El número de niños sin compañía no mexicanos a los Estados Unidos ha sido tal en el año fiscal 2014 que ha estrangulado los recursos de hospedaje y transportación del gobierno de los Estados Unidos. Niños aprehendidos son transferidos a la Oficina de Restablecimiento de Refugiados”, menciona.

Después de la transportación, los menores son entregados a familiares, guardianes legales o patrocinadores dentro de los Estados Unidos, por lo que “al no ser deportados inmediatamente ha provocado que otros niños sin compañía, no mexicanos, migren a los Estados Unidos”, se acepta en este diagnóstico sobre el fenómeno.

“Los factores de migración incluyen la reunificación con familiares dentro de los Estados Unidos y migración exitosa, más de 98% de niños sin compañía no mexicanos son demandados para presentarse en Corte y no inmediatamente repatriados”, agrega.

Adicionalmente, información de los agentes en la frontera indica que en el año fiscal 2014 “ha habido una gran prevalecencia de embarazadas, así como con enfermedades mentales o discapacidad física entre los migrantes no mexicanos, más que en años anteriores”.

El reporte del Departamento de Seguridad Interna indica que en junio pasado el gobierno de Estados Unidos ordenó acelerar los procesos de deportación, pero se carece de un mayor número de jueces para acelerar este procedimiento administrativo de carácter migratorio que puede tardar, incluso, meses.

Enfatiza que éste es uno de los factores que han incidido en la crisis humanitaria de menores migrantes no acompañados que en los últimos meses se incrementó en Estados Unidos, por lo que la administración ha tenido que reconocer los problemas para albergar a estos menores, cuyas imágenes, hacinados en los centros de detención migratorio, puso de nueva cuenta el tema como una prioridad en la agenda regional, incluyendo el papel de los países expulsores como Honduras, El Salvador y Guatemala.