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Con la reforma político-electoral recién aprobada en el Congreso de la Unión, los partidos políticos emergentes (pequeños) se jugarán su existencia pues deberán obtener una votación mínima de 3% en las elecciones federales, y no de 2% como es actualmente; ese porcentaje también será obligatorio para los 32 registros que actualmente buscan ser partido político.

Antes de concluir 2013, los legisladores endurecieron —mediante una serie de reformas a la Constitución— el requisito principal para la permanencia de nuevos y pequeños institutos políticos nacionales, lo que pone en aprietos al Partido del Trabajo (PT), Movimiento Ciudadano (MC), Nueva Alianza (Panal) y Verde Ecologista de México (PVEM); sin embargo Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que está en la búsqueda de obtener su registro, será quien enfrentará mayores dificultades.

A los anteriores se sumarán 31 asociaciones y organizaciones que buscan —entre ellas Encuentro Social, Frente Humanista y Organización Liberal— obtener un registro como partidos políticos, y que podrían enfrentar las urnas en 2015, en la elección intermedia.

“El partido político que no obtenga, al menos, el 3% de la votación total emitida en cualquiera de las elecciones que se celebren para la renovación del Poder Ejecutivo o de las cámaras de Congreso de la Unión, le será cancelado el registro”, detalla la nueva redacción del artículo 41 constitucional.

Antes de estos cambios a la Carta Magna, era indispensable que los partidos políticos tuvieran, para retener su registro y obtener los recursos públicos que da el IFE, al menos el 2% de la votación.

En la pasada elección federal, el PT obtuvo el 4.8% de la votación; Movimiento Ciudadano el 4.2%; Panal el 4.3% y PVEM el 6.4%.

Estos resultados le significaron en 2013 un presupuesto ordinario de mil 104 millones de pesos, el cual se repartió de la siguiente manera: 273 millones 435 mil pesos al Partido del Trabajo; 313 millones 466 mil al Partido Verde Ecologista; casi 258 millones a Movimiento Ciudadano; y 260 millones de pesos para el partido Nueva Alianza.

Estos cambios tras la reforma fueron criticados por diputados del PT y MC, quienes consideraron que este nuevo umbral se fijó sin algún fundamento de peso.

El diputado de MC, Alfonso Durazo, explicó que la reforma política en su conjunto es deficiente, porque no atiende lo fundamental, que son los mecanismos para la disputa democrática del poder. Respecto del nuevo umbral para conservar el registro de un partido político, dijo que esto refleja el objetivo histórico de los partidos mayoritarios en el sentido de ser ellos los que conserven el control político del país.

“Quieren llevar el sistema de partidos a sólo tres institutos políticos, de tal manera que el resto de los ciudadanos que encuentran en otras opciones políticas un espacio se vean obligados a votar por alguno de los tres partidos mayores, es decir, PRI, PAN o PRD (…) al hacer esta reforma los partidos mayoritarios están haciendo mal las cuentas”, denunció Durazo.

Para la diputada del PT, Lilia Aguilar, el 3% es un número que se fijó sin contar con argumentos sólidos, por lo que consideró que fue arbitrario elevar el umbral.

“¿Por qué el tres y no el cinco o el 20%? Si es el caso, elevemos el umbral a lo más alto para ser competitivos a todos, incluidos PRI, PAN y PRD. Me parece que esta decisión sólo demuestra que se quiere acabar con la pluralidad y con la representación de la minorías”, dijo.

La legisladora chihuahuense y miembro de la dirección nacional del PT consideró que no hay algo que fundamente este número, porque no hubo algún análisis de por medio que sustentara esta decisión tomada por el Congreso.

De acuerdo con Aguilar Gil, en el PT están seguros de sus militantes, por lo que pronostican que mantendrán los porcentajes que históricamente han tenido y que este instituto seguirá en el plano político.

En el caso de Morena, su presidente Martí Batres dijo hace unos días que cumplirán “sobradamente” con la afiliación de militantes para su registro como partido.