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Al expresar su deseo de que 2014 sea un año de crecimiento y bienestar, la Arquidiócesis Primada de México señaló que la desigualdad social es el gran desafío para el mundo y, especialmente, para México.

A través de la editorial del semanario Desde la Fe, reconoció la aprobación de reformas estructurales, aunque dijo que “no servirán si sólo favorecen a los grandes inversionistas sin que los beneficios lleguen a la población que vive en pobreza.

Destacó que iniciamos un año nuevo con deseos de crecimiento y bienestar, con muchas expectativas para superar el difícil 2013, pero “no bastan los buenos deseos, no bastan los discursos oficiales sin sustento” .

La Arquidiócesis dijo que “se requieren decisiones claras dirigidas hacia un reordenamiento de las políticas públicas a favor del ser humano para alcanzar mejores niveles de justicia y desarrollo”.

En este marco, externó su preocupación por “el deterioro económico que sufrió México el año pasado, sobre todo cuando éste no se debió a causas externas”.

“En nuestro país tienen el rostro de indígenas, migrantes, mujeres explotadas, niños sin educación” , subrayó la Arquidiócesis.

Época de globalización

En la misa dominical, el cardenal Norberto Rivera destacó que se vive en una época que se gloría de llamarse globalizada, universal, planetaria, “y con frecuencia acudimos al lugar común y ya trillado de comparar y designar nuestro mundo como la aldea global, sin fronteras, sin distancias, interconectada”. Dijo que es evidente que hombres y pueblos andan divididos, luchando por defender intereses propios. (Con información de Notimex)