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El Senado de la República desechó 130 minutas que recibió de la Cámara de Diputados en los últimos 12 años, que incluyen siete reformas constitucionales y 13 decretos de leyes nuevas.

En la “congeladora” legislativa estaban reformas en favor de jornaleros, adultos mayores, niños, grupos vulnerables; quedó detenido un decreto en favor de deudos de veteranos de la Revolución y un fideicomiso de fomento al tequila, entre otros temas.

Disposiciones en protección de periodistas se perdieron entre los expedientes susceptibles de convertirse en ley y que nadie rescató, a pesar de que —como en todos los casos— cada tema aprobado por el pleno supuso la realización de un proceso legislativo con al menos dos años de duración, incluidos foros de debate.

El mismo Poder Legislativo fue objeto de su propio desinterés, al dejar intocadas minutas de los diputados que ajustaban y modernizaban su funcionamiento, con diversas modificaciones a la Ley Orgánica del Congreso.

Otros cambios que se petrificaron corresponden a las leyes en materia de justicia, laboral, medio ambiente, salud, fomento industrial y vivienda que, con el paso del tiempo perdieron actualidad. La muerte por olvido de estos asuntos que se acumularon a lo largo de tres legislaturas —entre 2002 y 2009—, anuló el trabajo legislativo de diputados que llevaron adelante el procedimiento de reformas constitucionales, desde la presentación de iniciativas hasta su votación en el pleno.

Al marcar las minutas como “asuntos concluidos”, el Senado establece que “la excesiva demora en el desahogo” de los procedimientos legislativos, contradicen la esencia de la función de análisis de la cámara revisora.

El olvido desechó, por ejemplo, medidas en favor del adulto mayor en la Ley General de Salud, que llegó al Senado el 11 de abril de 2002, y que permaneció sin promoción alguna en las comisiones a las fue turnada.

El acuerdo de limpiar la congeladora legislativa señala que los temas perdieron actualidad, por el transcurso del tiempo o por la aprobación de legislaciones que rebasan la materia que había tocado, en este caso los diputados.