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IGUALA, Gro.— Integrantes de la Policía Comunitaria de la Costa Chica que buscan a los 43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa que fueron vistos con vida por última vez el pasado 26 de septiembre, localizaron cuatro fosas clandestinas más.

Miguel Ángel Jiménez, uno de los integrantes que busca a los alumnos y miembro de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (Upoeg), manifestó que el hallazgo se efectuó en un paraje conocido como la Barranca del Tigrillo, luego de información proporcionada por habitantes de Iguala.

Las fosas se ubican a 20 minutos de la cabecera municipal, y a la mitad de las comunidades de Pueblo Viejo y San Miguelito, donde la fiscalía del estado y la Procuraduría General de la República (PGR) localizaron nueve fosas. En cinco de ellas se exhumaron 28 cadáveres calcinados.

La comunidad más cercana es la de Grajales, y en ellas la falta de servicios básicos es notoria en las casas de lámina y cartón. En el lugar fueron identificadas una mandíbula, huesos, así como ropa y calzado de menores y adultos esparcidos en diferentes lugares.

Además, se ubicaron rastros de sangre, un cartucho percutido, una hacha con rastros hemáticos en la culata, basura y los restos de una fogata. Todos estos hallazgos fueron marcados por elementos de la fiscalía del estado, quienes colocaron conos anaranjados para marcar cada uno de ellos.

El grupo de búsqueda salió de la explanada municipal por la mañana acompañado por personal de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y de la Fiscalía General de Guerrero. Al mostrarles el lugar agreste y cubierto de árboles donde se encuentran los restos humanos, elementos de la Policía Ministerial de la entidad comenzaron a marcar los hallazgos y acordonar la zona para evitar que sea contaminada.

De acuerdo con las fuentes consultadas, se espera que en las siguientes horas se trasladen peritos y personal forense para realizar las excavaciones pertinentes.

Elementos de la Policía Federal mencionaron que además de este hallazgo, se realizaban trabajos de búsqueda en minas, ya que según los reportes con los que cuenta, pueden ser localizados más restos o incluso cuerpos completos.

El lugar fue acordonado por elementos de la Policía Federal, quienes un kilómetro abajo de las fosas impiden el paso de cualquier persona.

Los integrantes de la Upoeg consideraron que el lugar es un “cementerio clandestino” donde se encuentran los restos humanos de distintas personas que fueron enterradas años atrás.

La Upoeg manifestó que no han tenido apoyo de las autoridades, y que los trabajos de excavación los realizan con palos y ramas que se encuentran en la zona.

Este grupo de búsqueda proveniente de la Costa Chica llegó al municipio de Iguala la semana pasada, luego de que padres de los alumnos desaparecidos les pidieran su ayuda para encontrar a sus hijos.