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La solicitud de licencia de Ángel Aguirre Rivero a la gubernatura de Guerrero fue bien recibida por la clase política, aunque reconocieron que a pesar de su decisión el problema de la entidad no se resuelve.

La determinación tomada el miércoles por la noche en una reunión entre Aguirre y Carlos Navarrete, presidente nacional del PRD, representó un viraje en el perredismo tras el apoyo mostrado apenas en el Consejo Nacional el sábado pasado.

En un mensaje posterior al anuncio de Aguirre en Chilpancingo, Navarrete dijo que planteó al mandatario que solicitara licencia y estar disponible para contribuir a la investigación y al fincamiento de responsabilidades, “independientemente si son de nivel municipal, estatal o federal”.

Fuentes del PRD confirmaron que Aguirre “ya era insostenible en el cargo” y que él pidió garantías, como mantener funcionarios de confianza en algunas áreas , entre ellas las relacionadas con las finanzas estatales.

Navarrete pidió a los legisladores locales que resuelvan el nombramiento del sucesor, “que reorganice al gobierno estatal, abra canales de diálogo con la sociedad guerrerense y se sume a las investigaciones para encontrar a los jóvenes y fincar responsabilidades”.

El documento leído sin aceptar preguntas fue criticado por René Bejarano, líder de Izquierda Democrática Nacional, quien denunció que la dirigencia se opuso a incluir un párrafo para solicitar que se evalúe la permanencia en los cargos “de los principales funcionarios responsables de la seguridad y la procuración de justicia a nivel nacional”, pues en lo ocurrido con los normalistas habría también responsabilidades federales.

Diputados federales y locales por el estado de Guerrero, denunciaron que Ángel Aguirre Rivero y los guerrerenses fueron “sacrificados” y “negociados” en aras de encubrir responsabilidades federales.

Correcto

Ricardo Anaya, líder nacional del PAN, calificó como “correcta” la decisión de Aguirre, aunque no la “solución definitiva al problema” y precisó que la prioridad sigue siendo encontrar a los 43 jóvenes desaparecidos, y resolver la grave crisis institucional y de seguridad de Guerrero.

El panista dijo que estarán atentos al curso del caso y aseguró: “No vamos a partidizar este asunto, sería muy poco ético hacerlo”.

Miguel Alonso Raya, coordinador del PRD en San Lázaro, pidió que se respete la regla no escrita de que se elija a un miembro del PRD como sustituto.

Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, dijo: “Esta debe de ser una oportunidad para ubicar los problemas que nuestro país tiene y de esa forma plantear diversas reformas para que no vuelvan a ocurrir casos como el del 26 de septiembre”.

“Lo que más duele, (es) el crimen y desaparición de los jóvenes de Ayotzinapa” que no se han resuelto, escribió Andrés Manuel López Obrador, líder del partido Movimiento Regeración Nacional (Morena), en su cuenta de Twitter, en donde expresó que la salida de Aguirre era necesaria.

López Obrador también redactó en Facebook sobre su prospecto a candidato al gobierno de Guerrero, el ex senador Lázaro Mazón, a quien, junto con él, “trataron de involucrar” con José Luis Abarca, ex edil prófugo del municipio de Iguala, Guerrero, en donde fueron atacados y desaparecieron jóvenes normalistas de Ayotzinapa.

El PRI nacional guardó silencio en torno a la solicitud de licencia de Ángel Aguirre Rivero; en San Lázaro, el vicecoordinador del PRI, Manuel Añorve Baños, dijo que para su bancada la prioridad es encontrar a los 43 estudiantes desaparecidos.