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Veracruz, Ver.— El presidente Enrique Peña Nieto advirtió que la experiencia internacional demuestra que invertir en ciencia y tecnología, en innovación y en desarrollo, “es un camino seguro para el crecimiento económico sostenido de largo plazo” de las naciones.

Al entregar el “Premio México de Ciencia y Tecnología” dijo que por eso México está respaldando con decisión a la ciencia. Señaló que en 2015, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) tendrá un presupuesto de más de 37 mil millones de pesos para apoyos científicos.

En el Teatro de la Reforma, al clausurar el Foro Repensar Iberoamérica, hizo notar que esta cantidad representa es un incremento nominal de 46%, respecto al que se invertía en el sector hace apenas dos años, cuando inició su administración.

“Y el objetivo es que la inversión pública y privada en ciencia y tecnología, llegue a ser, al menos, de 1% del PIB, sí reconocemos que partimos de una inversión muy inferior a la que hacían otras naciones de mayor desarrollo, y que en México era apenas del 0.4% con respecto al PIB”, dijo.

Para 2014, el gobierno de la República planteó en el Presupuesto de Egreso de la Federación una partida de 31 mil 586 millones de pesos para el Conacyt, lo que representó un incremento en 20.5% en términos reales respecto a 2013.

Acompañado por el rey Felipe VI, y los presidentes de Chile, Uruguay y Perú, el presidente Peña Nieto dijo que el compromiso de su gobierno con la generación del conocimiento, queda patente al entregar este galardón.

El “Premio México de Ciencia y Tecnología” lo entrega el gobierno mexicano desde 1990 a los investigadores de Iberoamérica. Los galardonados de este año son los doctores Juan Carlos Castilla, Víctor Alberto Ramos y Carlos Martínez Alonso.

Peña Nieto dijo que en el marco de la 24 Cumbre Iberoamericana, el intercambio de experiencias en torno a la educación, la cultura y la innovación, permitirán contar con nuevos elementos para hacer frente a los grandes retos que tienen nuestras sociedades.

“De Baja California a Tierra Fuego, de las Islas Galápagos a los Baleares, compartimos el anhelo de construir una Iberoamérica a la altura de la riqueza histórica, artística, cultural y científica que nos hermana.

“Una Iberoamérica moderna e innovadora, capaz de impulsar el desarrollo democrático y social de nuestras naciones. Una región trasatlántica que trabaja para ofrecer a sus ciudadanos entornos idóneos para su plena realización personal”, asentó.

El presidente llamó a los gobiernos de Iberoamérica a trabajar para que el acceso a las nuevas tecnologías.

“En la vida democrática de Iberoamérica los estados deben garantizar que los servicios de telecomunicaciones sean prestados en condiciones de competencia, calidad, pluralidad, cobertura universal, interconexión, convergencia, continuidad, acceso libre y sin injerencias”, dijo.