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APATZINGÁN, Michoacán.— El gobierno federal y los líderes de las autodefensas acordaron la “desmovilización paulatina” de estos grupos y, como parte de ello, no avanzarán más a otros municipios del estado.

Además, acordaron retirar las barricadas en las comunidades donde ya no es necesario que operen, para dejar la seguridad a la Policía Federal. Sostuvieron: “Nosotros somos civiles, no tenemos por qué andar armados”.

Luego de una reunión privada de casi cinco horas en la 43 Zona Militar ubicada en Apatzingán, entre Alfredo Castillo Cervantes, comisionado para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán y dirigentes de las autodefensas, entre ellos Hipólito Mora, Estanislao Beltrán y José Manuel Mireles, este último señaló que entre otros puntos se estableció que harán una depuración interna porque hay muchos infiltrados y que los miembros de los grupos civiles sólo actuarán en acompañamiento con las fuerzas federales.

“Vamos a pasar toda la información del municipio donde detectemos movimiento, de gente armada, de templarios o de algún otro grupo del crimen organizado para desarticularlos”, insistió Mireles. Además, apuntó que lo que antes hacían para atacar puntos donde operan templarios en cuatro días, ahora lo harán en unos 45 minutos.

Resaltó que los autodefensas no llegarán a Morelia, Zamora o Lázaro Cárdenas, ni participarán en alguna toma de cabeceras municipales o alcaldías, con lo que se deslindaron de la ocurrida el lunes pasado en Apatzingán.

Padre niega acusaciones

El vicario de esta localidad, Gregorio López, aseguró que él no participó en la incursión de ciudadanos de ese municipio y que, respecto a las acusaciones en contra del alcalde Uriel Chávez, se harán las denuncias legales.