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La relación bilateral entre México y España atraviesa unos de sus mejores momentos, destaca Jesús Gracia, secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica desde hace tres años, por lo que la visita de Estado a territorio español, por parte del presidente mexicano Enrique Peña Nieto se da en un momento clave para ambas naciones.

Pero la visita también tiene un carácter especial en España ya que será la última vez en que el rey Juan Carlos de Borbón reciba a un jefe de Estado antes de abdicar el día 19 de junio en su hijo Felipe.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Gracia reconoce que la crisis económica que vive España ha cambiado las relaciones entre los dos países, que ahora ambos se miran “de igual a igual”, y asegura que España es una gran oportunidad para hacer negocio porque ahora “está barata”.

De México alaba las reformas que ha llevado a cabo, y dice que para crecer más necesita el capital humano e inversión en infraestructuras. Reconoce además que el crimen organizado y la llegada de cárteles mexicanos a España preocupan mucho al gobierno que preside el conservador Mariano Rajoy, del Partido Popular (PP).

Desde hace tres años usted es secretario de Estado de Cooperación y para Iberoamérica, ha viajado con el príncipe Felipe de Borbón, ¿Cómo es el príncipe?

Es una persona que conoce perfectamente Latinoamérica. Ha estado en todos los países, se ha entrevistado con gobernadores o ministros cada vez que han venido a Madrid así que por todo eso conoce a las personas, las sensibilidades de los países, las sociedades... Está preparado para reinar.

¿Y cómo son las relaciones entre España y México?

Las relaciones están en un estado excelente. Es estrecha en lo político, y en todos los foros internacionales ambos encontramos un apoyo total y mutuo. Y hay una relación económica de inversión muy importante. Además de una relación histórica y cultural de muchos años... También Enrique Peña Nieto y Mariano Rajoy tienen buena relación.

¿La crisis económica que vive España cambió su relación con México?

Sí. A fines de los años 80 y 90 México pasó unos años difíciles con la crisis del tequila pero ha encontrado un camino de salida y ahora está aprovechando las oportunidades que le da el contexto internacional. Ahora, México tiene lo que siempre debía tener: un peso en la política internacional y en el mundo muy importante. Ahora nos miramos más “de tú a tú”, “de igual a igual”. Pero es lo lógico. Hoy por hoy es un país que remite y España está al mismo nivel: estamos saliendo de esta crisis. En esta relación madura, de intercambio, entre iguales, podemos colaborar y ganar los dos.

Las inversiones españolas en México son muy grandes pero las mexicanas en España no. ¿Por qué?

La inversión extranjera en México es la segunda más importante y la de México en España está aumentando en estos últimos años. Pero es lógico que haya sido así hasta ahora. Porque cuando tú tienes una construcción interna de la economía no sales hacia afuera. México tiene una relación muy fuerte hacia Estados Unidos. Pero las cosas están cambiando.

Además de que ahora invertir en España es barato.

Sí. España está más barata. Los costes de ingreso en España no son tan altos como cuando había una gran demanda, y la economía mexicana ha mejorado sustancialmente y está en esa fase de despegue, de internacionalización.

México está llevando a cabo muchas reformas. ¿Cuál es la que más va a favorecer a nuestro país?

Todas las reformas son importantes porque para que el país funcione, sea atractivo, tenga una presencia y un crecimiento grande necesita reformas que a veces no están directamente vinculadas con la economía. Una reforma educativa es fundamental, pero también una reforma energética, de telecomunicaciones, tributaria y política. No pueden ir solas.

¿Qué podemos aportar y que le falta a México?

Un país que está creciendo lo que necesita es recursos humanos calificados. Los hay y muy buenos, pero en una perspectiva de crecimiento necesitan más, y allí tenemos una oportunidad de trabajar juntos. Ahí la experiencia española es importante.

¿Preocupa a España la presencia de cárteles mexicanos?

Nos preocupa y mucho. Estamos trabajando en ello y vamos a colaborar con las autoridades mexicanas para que esa lacra que es la inseguridad y las bandas de criminales no sigan actuando en México, y no puedan encontrar en España apoyo a su trabajo.

¿Cómo es la colaboración en ese aspecto?

Estamos a disposición del gobierno mexicano para mejorar los aspectos de seguridad, de formación policial o de acción policial. Y los expertos en seguridad se han entrevistado para colaborar en formación. Pero México también esta teniendo su redefinición del sistema de seguridad. Además de eso, es muy importante la información porque el crimen es transnacional y tenemos que tener una colaboración porque lo que ocurre en México de una manera u otra termina afectándonos.

Muchos empresarios españoles se quejan de la corrupción en México a la hora de hacer negocios.

La corrupción es mala en México y en cualquier otro sitio, es algo que hay que evitar y combatir, y así vamos a hacerlo.

Me consta que el gobierno de México es consciente de ello igual que el español.

Hay quien dice que no ha sido tan exitoso y las cifras lo demuestran.

Eso no es cierto. Sí ha creado comercio y éste sí ha aumentado. Mexico tiene una posición geográfica determinada, con un TLC con Estados Unidos que genera una desviación de comercio y de inversión enorme hacia ese país. Y lo mismo ocurre con España.

Unos días antes de la visita del presidente Peña Nieto, Petróleos Mexicanos (Pemex) ha anunciado su salida de Repsol. ¿Ha sido para allanar el camino en esta visita? ¿Va a tener repercusiones en la relaciones políticas?

No sé si ha sido para allanar el camino. El gobierno de España desde luego no ha presionado y la salida de Pemex de Repsol no va a repercutir en las relaciones comerciales, ni políticas con España. Ha sido una decisión de las dos empresas que han tenido diferencias y nada más. México habrá hecho esto de acuerdo a sus intereses. En el caso de Repsol, a veces te gustaría una cosa y lo lógico parece que así fuera, pero las condicionantes internos no las podemos conocer. Dicen que ha sido cuestión de formas. Desde luego en los negocios y en la política es muy importante.

¿Orgullo mexicano?

No lo creo. Lozoya dijo que había sido orgullo español, así que no lo creo. Creo que han hecho lo mejor para sus accionistas.