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Agentes de Estados Unidos detuvieron en menos de ocho meses a 52 mil migrantes menores no acompañados que ingresaron de forma ilegal a ese país, cifra que representa una “seria situación humanitaria”, reconoció Anthony Wayne, embajador de ese país en México, quien anunció que funcionarios de alto nivel de ambas naciones, así como de Guatemala, El Salvador y Honduras, se reúnen hoy para abordar este tema y buscar una solución regional al fenómeno, que expone a graves riesgos a los infantes.

A este encuentro que se realizará en Guatemala, teniendo como anfitrión al presidente Otto Pérez Molina, asistirán el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden; el secretario de Gobernación mexicano, Miguel Ángel Osorio Chong; el primer mandatario de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, y el representante de alto nivel del gobierno de Honduras, el coordinador general Jorge Ramón Hernández Alcerro.

En una declaración que emitió el embajador Wayne, destacó que el gobierno de su país “está en contacto con los más altos niveles para buscar soluciones al problema”, ante el creciente flujo de migrantes menores no acompañados que intentan llegar a Estados Unidos.

Este será el tema central de la reunión de hoy en Guatemala, en la que las autoridades buscarán una solución regional a la creciente migración infantil. “Ellos dialogarán sobre nuestro apoyo en seguridad y economía hacia América Central, y de manera más general, sobre nuestro compromiso por fortalecer nuestra cooperación con la región”, detalló el diplomático.

Dijo, además, que en el caso concreto de México “autoridades estadounidenses en Wa- shington y aquí en la embajada, están trabajando directamente con sus contrapartes”, lo que incluyó esta misma semana una reunión entre Wayne y el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), José Antonio Meade; además de que el equipo del embajador ha dialogado sobre el tema con numerosos funcionarios mexicanos de alto nivel, así como con líderes de la sociedad civil y representantes de organizaciones internacionales.

El diplomático estadounidense reconoció que, del 1 de octubre de 2013 hasta el 15 de junio pasado, agentes de procuración de justicia estadounidenses han aprehendido a más de 52 mil migrantes menores no acompañados que entraron a los Estados Unidos sin la documentación requerida. “Esto representa cerca del doble de los que entraron sin compañía de adultos durante todo el año pasado, y los números continúan creciendo”.

Admitió que “nuestras naciones y comunidades enfrentan una seria situación humanitaria causada por el gran flujo de menores migrantes no acompañados, provenientes principalmente de América Central a través de México, y que entran a Estados Unidos”.

EL UNIVERSAL informó la semana pasada que el gobierno de Estados Unidos ha repatriado, entre 2012 y abril de este año a más de 45 mil menores de edad que viajaron solos a ese país, de los que más de 33 mil eran mexicanos y 10 mil provenían de Centroamérica, de acuerdo con un informe del Instituto Nacional de Migración (INM).

En su mensaje, Wayne subrayó: “Estos menores son de los migrantes más vulnerables. Enfrentan un viaje muy peligroso en su camino al norte, que se ha vuelto más peligroso que en el pasado. La cuota humana —en muertos, heridos y experiencias traumáticas que incluyen el abuso sexual— es inmensa y de un impacto profundo”.

Destacó que “algunos migrantes, incluyendo números crecientes de menores, buscan cruzar la frontera sin documentación ante la errada impresión de que si llegan a Estados Unidos se les permitirá permanecer. Esto no es cierto”.

Ayer se informó que Estados Unidos activó una línea telefónica para que padres centroamericanos busquen a sus hijos. En el 1-800-203-70-01 se pide en español dar el nombre, la fecha de nacimiento, lugar por donde cruzó (si lo saben) o si tienen algún número de expediente en caso de un reporte previo.

También se puso a disposición de los familiares la página web www.uacportal.org, para ingresar datos del menor.