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En materia de salud, la administración del presidente Enrique Peña Nieto no ha registrado ni avances, ni cambios. Al contrario la Secretaría de Salud es vista actualmente como una instancia “tibia e inerte”, que solo ha dado continuidad a los programas diseñados en el sexenio pasado, sin ofrecer nada nuevo, aseguran especialistas de la UAM, Fundar y diversos sectores de la sociedad.

Gustavo Leal Fernández, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana, plantel Xochimilco, afirmó que a un año de gobierno, “estamos peor en la agenda de salud con respecto a la administración pasada”, pues no se percibe mejoras en la prestación de los servicios de salud.

Dijo que tanto el IMSS y el ISSSTE se mantienen en la misma inercia registrada desde hace años.

La administración de Mercedes Juan López al frente de la Secretaría de Salud ha marcado como su principal reto el acceso universal a los servicios de salud, bajo un modelo homologado de atención con calidad.

Para ello, la funcionaria ha informado que renovarán infraestructura y el equipamiento de las unidades de primer contacto, así como centrará sus acciones en la prevención de las enfermedades crónicas no transmisibles, así como en adicciones.

Sin embargo, las cifras actuales ofrecen un panorama de salud complicado para los próximos años.

Hace seis años, 53 mil 600 personas fallecieron en el país a causa de males cardiacos. Aunado a ello, México encabeza la lista con el mayor número de población con sobrepeso y obesidad en el mundo.

Para Abelardo Ávila Curiel, investigador del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, sigue habiendo muchos pendientes en salud.

Sin embargo, agregó, lo que hasta el momento se ha visto es básicamente una promoción y continuidad del modelo de salud del anterior sexenio.

Y eso preocupa, exclamó, porque no se ve una mejoría en la calidad de los servicios de salud, es inercial, y se ha centrado sólo en la cobertura por afiliación al Seguro Popular cuando la realidad es que hay un enorme rezago en la atención. Dijo que no se puede responsabilizar de todo a la Secretaría de Salud, porque se sigue arrastrando una descentralización a medias, donde el gobierno federal ya no es responsable de los servicios de salud estatales, los cuales algunos ya no están respondiendo al reto que representa administrar los servicios de salud de sus entidades.

Por otro lado, dijo, está la política preventiva. “Seguimos esperando a estas alturas que se dé a conocer el Programa de Combate al Sobrepeso y a las Enfermedades Crónicas”, dijo.

Sobre este punto, el investigador Gustavo Leal criticó que el gobierno federal trate de responsabilizar a la población de la epidemia de sobrepeso y diabetes que se vive en el país a causa de sus hábitos alimenticios y falta de ejercicio físico, “lo que tiene que ver más con la incapacidad gubernamental para regular el patrón de consumo”.

El investigador en políticas sociales consideró que la administración de Peña Nieto se comporta igual que lo hicieron los gobiernos panistas, los cuales estigmatizaron a los pacientes y no se comprometieron en mejorar la atención médica y a diseñar políticas de prevención.

Respecto a su balance en materia de salud en este primer año de gobierno, Abelardo Ávila, investigador e integrante de la Alianza por la Salud Alimentaria, advirtió:

“Yo siento que estamos siguiendo la inercia de la administración pasada, cuando hay un claro compromiso que hizo el presidente Peña Nieto al tomar posesión de su cargo, que no se iba a tratar nada más de administrar, sino también de transformar. Yo no veo claro que se estén enfrentando los graves problemas de salud de la población”.

Consideró que si bien se mantiene la calidad en los institutos nacionales de Salud y en la operación del IMSS e ISSSTE, no ve ese cambio que todos quisiéramos observar en materia de acceso a los servicios de salud con calidad y prevención efectiva de las enfermedades crónicas que están asolando la salud de la población del país.

En su reflexión, Erick Antonio Ochoa, director de Iniciativas para el Control del Tabaco de la Fundación Interamericana del Corazón (FIC) México, aseguró que se necesita de un rol más relevante por parte de la Secretaría de Salud para posicionar la agenda de salud como una prioridad en la política nacional. “Requerimos que la agenda de salud esté en las prioridades de la política nacional”, sostuvo.

Incluso, dijo que las organizaciones de la sociedad sigue esperando que el tema de salud retome la importancia que debe tener en la agenda nacional, y una pieza clave es la titular del ramo que debe incidir para ello. Consideró que si bien los rezagos en salud son muchos y que no se pueden todos atender al mismo tiempo, con los meses que han pasado, ya se puede hacer un corte de caja hacia el primer Informe de Gobierno.