alberto.morales@eluniversal.com.mx  

En México hay condiciones para ampliar el modelo de “Cortes de Drogas”, que funciona en Nuevo León, con el que se pretende dar una segunda oportunidad a primodelincuentes en cárceles y generar mejores prácticas en los juzgados, aseguró Roberto Campa, subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana.

Al participar en el Seminario La Justicia Terapéutica. Una Alternativa En Desarrollo, en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, dijo que dentro del Programa Nacional de Prevención de la Violencia y la Delincuencia han comenzado los trabajos de este modelo cuyo nombre oficial es Tribunales de Tratamiento de Adicciones (TTA).

Sobre la propuesta de regulación de la mariguana en México, expuso que se requiere de un análisis a fondo, en el cual se contemple la experiencia internacional y no sólo local para tomar la mejor decisión, porque el riesgo de la legalización está asociado con el incremento al consumo.

“Es un tema serio que requiere de un análisis de fondo para poder tomar las mejores decisiones. Es un tema que no se resuelve sólo a nivel local, sino que tiene que resolverse a nivel internacional, regional y que conviene hacer un análisis de las consecuencias de los distintos modelos que se han venido adaptando y adoptando en el mundo”.

“Podemos identificar países que mantienen modelos de prohibición total, otros que optan por un modelo abierto de legalización y también tenemos ejemplos como el de México, que han optado por la despenalización del consumo.

“La diferencia es muy clara, en el caso de la legalización lo que se pretende es resolver el proceso completo, que tiene que ver con la oferta y la demanda a partir de un esquema donde se legaliza el proceso; en el caso de la despenalización, modelo que hemos seguido en México, lo que se pretende es un beneficio para el consumidor, para quien tiene la adicción”, expuso Campa Cifrián.