Reforma fiscal, una historia inacabada
EN CONTRA. En diciembre de 2003, bajo el gobierno de Vicente Fox, diputados del PRI echaron abajo una propuesta para aumentar el IVA. (Foto: ARCHIVO EL UNIVERSAL )
ariadna.garcia@eluniversal.com.mx
Desde su creación en 1980, la constante ha sido uniformar la tasa del Impuesto al Valor Agregado (IVA) con el fin de lograr una mayor recaudación de recursos en el país.
La reforma fiscal en México tiene su origen durante el sexenio de Luis Echeverría Álvarez, cuando se lanzó la propuesta económica de Desarrollo Compartido, misma que se aplicó pero con una mejoría en la economía escasa, toda vez que aunque aumentaba el gasto público, la inversión privada se preocupó por el fantasma de una reforma fiscal que amenazó con gravar los ingresos de capital de los inversionistas nacionales y extranjeros.
En 1980, bajo la presidencia de José López Portillo, entró en vigor la Ley de Coordinación Fiscal que reformó el Impuesto Sobre la Renta y creó el IVA como sustituto al impuesto federal sobre ingresos mercantiles.
La introducción del IVA eliminó más de 30 impuestos federales indirectos y 300 impuestos estatales. Desde entonces, la tasa del IVA ha sufrido ajustes importantes.
Actualmente, el IVA es de 16% para todo el país con excepción de la zona fronteriza, en donde es del 10%, y se mantiene un régimen de tasa cero para alimentos básicos, medicinas y libros, y un régimen de exención para algunos bienes y servicios.
En 1982, Miguel de la Madrid recortó el gasto y aumentó impuestos especiales y el IVA de 10% al 15%. Carlos Salinas de Gortari, en 1988, regresó el IVA a 10% y se apegó a la restauración de la estabilidad macroeconómica a través de un severo recorte al gasto.
La reforma más significativa al sistema hacendario del país se da cuando se aprueba la propuesta del presidente Ernesto Zedillo de otorgar autonomía al Sistema de Administración Tributaria (SAT). Aumentó el IVA del 10% al 15% buscando así aumentar la recaudación tributaria. Lo que no logró Zedillo fue eliminar la tasa cero del IVA en alimentos y medicinas.
Para 2000, el PAN logra la Presidencia de la República con Vicente Fox, quien envió al Congreso una reforma hacendaria, que no se logró.
En 2003 el PAN da a conocer una reforma que pretende lograr la aplicación de una tasa de IVA de 3% a medicinas y alimentos e incrementar de manera gradual hasta el 10% al 2006. PRI y PAN avanzaron en la elaboración de un primer documento de trabajo en el que se insiste en gravar con 5% de IVA en alimentos y medicinas, y disminuir las tasas máximas del ISR a 30% para personas morales y 25% para personas físicas.
En 2007 ya con el presidente Felipe Calderón, los diputados analizaron la homologación del IVA del 12% al 15% y la anulación de exenciones y tasas cero, lo que provocaría el gravamen en alimentos, medicinas y refrescos, entre otros. En el documento hecho a petición de la Comisión de Hacienda se establece que la reducción a 12% eliminaría los regímenes especiales de tasa cero y exentos, con una recaudación adicional de 193 mil 182 millones de pesos, equivalentes a 2% del PIB.
Para 2009 el Senado aprobó una cascada de impuestos: aumento al ISR de 28% a 30%, además del Impuesto de Depósitos en Efectivo, que pasó de una tasa de 2% a 3%, y ahora será a partir de los 15 mil pesos, en vez de 25 mil. También se avaló elevar la tasa del IVA de 15% a 16%, en sustitución de la propuesta inicial del gobierno de introducir un gravamen de 2% sobre las ventas de todos los bienes y servicios, con el fin de reforzar el combate a la pobreza; también se autorizó un impuesto a telecomunicaciones de 3%. (Fuente: Archivo de EL UNIVERSAL)