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La Procuraduría capitalina investiga las llamadas de extorsión que recibieron sacerdotes y el Vicerrector del Seminario Conciliar de México, por parte de una organización delictiva.

Es la Fiscalía Antisecuestros (FAS), de la PGJDF, la que inició las indagatorias, por lo que personal de dicha dependencia ya se presentó en las instalaciones del Seminario Conciliar para tomar conocimiento sobre las líneas telefónicas de las que posiblemente salieron las llamadas y las que las recibieron.

La Arquidiócesis dio a conocer que no entregó ninguna cantidad a quienes les llamaron, pues la institución prohíbe a los miembros que reciban este tipo de llamadas y ceder para entregar dinero.

La PGJDF indaga si este ilícito se encuentra relacionado con otros hechos de este tipo con organizaciones religiosas.

El vocero de la Arquidiócesis, Hugo Valdemar, dio a conocer ayer que el cardenal Norberto Rivera no fue quien recibió las llamadas para pedirle dinero, pero él sí fue quien pidió que se denunciaran los delictivos ante las autoridades correspondientes.

“El día 21 el cardenal dio la orden de que se presentara y se presentó ante el Ministerio Público y también entró en contacto el Rector con el fiscal de Secuestros del DF, quien ha estado al pendiente de este tema” indicó.

Los días 20 y 21 de noviembre fueron los días que se recibiendo llamadas: una el Vicerrector del Seminario Menor y otras dos sacerdotes.

Denuncia

El pasado domingo, el cardenal Norberto Rivera Carrera reveló a los feligreses durante la misa dominical que el Seminario Conciliar de México recibió diversas llamadas telefónicas de personas que se identificaron como presuntos integrantes del cártel de La Familia Michoacana, quienes demandaron el pago de 60 mil pesos.

Respecto a estas llamadas amenazantes, explicó que “querían, para empezar —porque si no matarían a alguno de nosotros—, querían para empezar 60 mil pesos. Y si empieza uno a pagar, pues ¡ya se hizo cliente!”, dijo Rivera Carrera.