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En torno al debate sobre la despenalización del consumo de mariguana, Fernando Cano Valle, comisionado nacional contra las adicciones, advirtió que México carece de la capacidad sanitaria —infraestructura, personal con experiencia y medicamentos— para poder atender a las personas adictas a las drogas legales como el alcohol y tabaco. Por lo que de sumarle el enervante, el problema será exponencial, advirtió.

El titular de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) explicó que esto se debe a que se ha demostrado científicamente, que el consumo de este enervante desata cuadros sicóticos y dispara mecanismos cerebrales antisociales.

Por ello, afirmó, legalizar la mariguana resulta a todas luces “irracional”, porque no sólo se carece de la infraestructura médica necesaria para atender la demanda de atención, sino de los recursos económicos suficientes para otorgar a esa población una rehabilitación integral.

En el marco de la inauguración del Primer Seminario Internacional La Justicia Terapéutica, Cano Valle dijo que “no sería suficiente, ni el doble, ni el triple (de recursos) para atender a las personas que tienen problemas de adicciones en general, entre ellas, mariguana”.

Mencionó que en este momento el Sistema Nacional de Salud cuenta con un presupuesto, de mil 200 millones para atender a 112 millones de mexicanos con algún grado de adicción, o que pueden caer en adicciones.

En este mismo foro, Roberto Campa Cifrián, subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación, aseguró que México no debe cerrarse a los modelos donde la legalización de la mariguana ha constituido un factor esencial para disminuir el consumo, la violencia, delincuencia y crimen oraganizado. Sin embargo, la determinación de su legalización en México debe hacerse sobre bases serias y bajo consenso nacional e internacional.

PGR: hay que evitar santuarios

Por separado, el titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, se pronunció por impedir que se creen santuarios de droga en algunos países, y consideró que el tema de la despenalización del consumo de mariguana se debe definir a nivel internacional.

Recordó incluso que en la legislación mexicana ya existe una regulación que establece las dosis mínimas de consumo, que no son consideradas un delito, y bajo este enfoque también hay una perspectiva de salud para la atención del fenómeno.

En el estado de Hidalgo, después de encabezar la ceremonia en la que se designó al nuevo delegado estatal de la PGR, se le preguntó a Murillo Karam sobre su posición respecto al debate que ha surgido sobre la legalización de la droga, y en concreto la despenalización del consumo de mariguana.

Dijo que “es un tema que tiene qué definirse en función de muchas cosas, fundamentalmente en los planos internacionales, una decisión de esta naturaleza está ligadamente necesariamente a un planteamiento de orden internacional, para no crear santuarios distintos, tiene que ser muy cuidada, muy analizada y muy especialmente definida”.

Destacó que en el caso de México, la propuesta de despenalización que hoy tiene apoyo, “no está lejos de lo que hay, si ustedes lo recuerdan hay una dosis permitida en la legislación que no constituye un delito y la ley es muy clara en cuanto a definir al consumidor como un problema de enfermedad, es un problema de salud, estoy hablando exactamente del caso que usted refiere”.

Murillo Karam se refirió así a la llamada Ley de Narcomenudeo, que se aprobó desde agosto de 2009, que en los hechos descriminaliza la posesión de ciertas cantidades de drogas consideradas para el consumo —no sólo en el caso de la mariguana—, y que establece además el tratamiento para las personas que son adictas.

Por otro lado, recordó el procurador, “lo que se pena con severidad, es el tráfico, es el abuso, entonces tenemos que puntualizar el debate para poder ser muy claros en la opinión”.